Albacete Basket-San Pablo Burgos. Cuestión de fe.

La fe es lo último que se pierde, al menos eso dicen. De los que tiran la toalla a primeras de cambio se les tilda como “gentes de poca fe”. Pero lo que nos espera este martes a las 18.00 en el Pabellón del Parque es un verdadero acto de fe, de la de verdad.
Si bien, el viernes pasado contra Zunder Palencia se vieron cosas muy interesantes del cuadro de David Varela, el resultado (101-81) demuestra que los brotes verdes que se apreciaron todavía son excesivamente tiernos. La contundencia palentina fue demasiado para un voluntarioso Albacete Basket en el que, por fin, destacaron dos de las nuevas incorporaciones: Remu Raitanen con 25 puntos y especialmente Chandler Jacobs con 15. Sin embargo, en la parte menos positiva, está la crisis de juego que atraviesa Gerard Blat que brilló por méritos propios en las primeras jornadas, sobre todo en la victoria frente a TAU Castelló que, por cierto, ya nos parece muy lejana. El base catalán no es de los que baja los brazos y volverá por sus fueros más pronto que tarde.
Qué se puede decir de San Pablo Burgos. Pues que es un equipo ACB en LEB Oro al que le está costando adaptarse a la nueva categoría con un balance de 6 victorias frente a 3 derrotas. Es sin duda un equipazo al que debemos tratar como tal y disfrutar de su juego en el Pabellón del Parque este martes día de la Constitución Española. Escuadra a la que hay que respetar, pero no temer ya que, como muestran sus tres derrotas, no es infalible y si se sale sin presiones y sin complejos se le puede, por qué no, dar un susto de los grandes.
Cuando el Albacete Basket subió a LEB Oro esto es lo que queríamos. Ver buenos equipos con grandes jugadores en nuestra pista para disfrutar de un baloncesto de primera línea. Es cierto que no está siendo la temporada que se pensaba tras la brillante victoria frente a Oviedo en la primera jornada. Pero qué podíamos esperar. Se dilató en exceso la consecución de los avales para poder salir en Oro, esto trajo consigo que se acudiera tarde al mercado, lo que tuvo como daño muy importante pinchar en el fichaje de un 5. Pechacek fue un fiasco. Pero esto es agua pasada, ahora nos queda pensar en un calendario ilusionante en el que la visita de San Pablo Burgos debe ser un hito para los que amamos este deporte en la ciudad de Albacete.
Es posible que se peque de exceso de optimismo al pensar en la victoria mañana. Pero soñar es gratis y la fe es lo último que se pierde. Todavía queda mucha tela que cortar esta temporada y el Albacete Basket está más vivo de lo que parece. Mañana se sale a por todas, como siempre.
(Foto cedida por el club)
