Bendita generación que feneces

Aún recuerdo los 2003 cuando moraba en un bello municipio catalán que respondía al nombre de Barberá del Vallés, donde además yo era segundo entrenador de los cadetes del club de allí.

Recuerdo cuando nos tocaba desplazarnos a Badalona para competir contra los de la misma categoría del mítico Joventut. Los chavales revoloteaban por el inmenso pabellón, rezando tener la posibilidad de ver y saludar a un tal Rudy Fernández. Jugador que empezaba a ser una reseña en el baloncesto nacional con tan solo 18 años.

20 años justos pasan sobre esa fecha cuando el jugador acaba de anunciar que tras la temporada que viene colgará las botas.

Y es que una bendita generación que nos ha hecho disfrutar, generación inigualable, fenece porque el pasar del tiempo nos lleva a eso. Una generación que lo ha ganado casi todo en el mundo de la canasta. Jugadores que han llevado al nombre de España a lo más alto.

Ya no está Juan Carlos Navarro. Ya no está Pau Gasol. Ya no están muchos… y ahora se retira el actual capitán de la selección. Una pena que algún día tenía que llegar.

Con un “le prometí a mi padre que los Juegos de París serían mi último torneo profesional” pondrá final a una carrera simplemente excepcional donde la espalda le ha dado mucho quebradero de cabeza.

De nacimiento Rodolfo Fernández Farrés, en Palma de Mallorca, empezó jugando al fútbol en el equipo de la barriada del Rafal en Palma de Mallorca, alternándolo con el baloncesto, porque Rudy era diestro con cualquier tipo de balón.

Tuvo la suerte de coincidir en la temporada 2003/2004 con Aíto García Reneses, reconocido descubridor de talentos jóvenes. Eso y las propias dotes del jugador hicieron que ascendiera en el mundo de la canasta como la espuma.

Ese año jugó con regularidad en su equipo, el Joventut de Badalona, y fue nombrado el jugador más valioso de la Copa del Rey aunque perdieran la final contra el Sasky Baskonia (81-77) disputada en Sevilla. Final en la que Rudy Fernández consiguió 15 puntos, incluido un mate de espaldas a pase de José María Guzmán.

El 28 de junio de 2007 es drafteado en el puesto 24 por los Phoenix Suns que traspasaron sus derechos a Portland Trail Blazers, convirtiéndose en el octavo español en jugar en la NBA. Camino que abrió el queridísimo Fernando Martín, siguiendo los pasos de Pau Gasol, Raúl López, José Calderón, Sergio Rodrígez, Jorge Garbajosa y Juan Carlos Navarro.

Su debut “nbasense” se produce contra los Menphis Grizzlies de Pau Gasol, donde el mallorquín anotó 16 puntos y repartió 4 asistencias.

Su posición natural duda entre escolta y alero, aunque nunca tuvo miedo, y así lo ha demostrado en ocasiones, a dirigir a su equipo o a sudar sangre dentro de la zona.

Otro de sus hitos históricos es que ha sido el primer español elegido para el concurso de mates de la NBA de 2009, donde fue eliminado en primera ronda, pero ahí estuvo.

Pasaron un par de temporadas y Rudy Fernández gritaba en silencio su añoranza a su familia, amigos y al baloncesto español.

“Soy un profesional y por eso estoy hoy en Portland. Quiero demostrar respeto a la franquicia de los Blazers, a la ciudad de Portland y a los aficionados del equipo. Quiero ir día a día con los objetivos de este año. Pero en mi corazón mi deseo es volver a casa, estar cerca de mi familia, de mis padres y de mis amigos. Espero y creo que todos los fans de Portland me puedan entender. Si en algún momento he dicho algo incorrecto pido disculpas. Nate McMillan es un buen entrenador y he aprendido muchas cosas de él pero mi estilo de juego se adapta más a Europa que al sistema de la NBA y por eso prefiero volver a casa. Ahora mismo no quiero pensar en jugar en otro equipo de la NBA porque mi equipo son los Blazers”.

Su mejor partido en la NBA fue contra Minnesota Timberwolves en el que Rudy Fernández anotó 26 puntos y capturó 6 rebotes. Y un años después tras el cierre patronal de la NBA puso fin a su primera aventura del sueño americano fichando por el Real Madrid.

Aunque su etapa madrileña solo dura unos meses, cuando la NBA se abrió y voló para terminar esa temporada con Denver Nuggets, pero Rudy Fernández pone fin a su periplo en la NBA al final de temporada y firma con el Real Madrid de Pablo Laso donde, quizás, haya jugado el mejor baloncesto de su vida. Pues hablamos de 2012 hasta que llegue la hora de su retirada.

Los triunfos con sus clubes, selección y triunfos personales no le han sido esquivos. Con el Joventut de Badalona ganó una Copa del Rey (2008), una ULEB Eurocup y una FIBA Eurochallenge en el mismo año.

Con el Real Madrid han sido 6 ligas ACB, 5 Copas del Rey, 8 Supercopas de España, 3 Euroligas y 1 Intercontinental.

Y a nivel individual la lista es interminable con 1 MVP de la final ACB (2017/2018), 3 MVP en la Copa del Rey (2004. 2008 y 2015, 1 MVP en la Supercopa de España (2012), así hasta 10 distinticiones individuales más.

Con la selección también son gran cantidad de títulos donde le faltaría poner el broche de oro, nunca mejor dicho, que ya debería ser en París en las próximas Olimpiadas.

Claro está que con este palmarés, con el recorrido deportivo y con su forma de ser, dará pena ver colgar las botas a un jugador que ya merece ver “colgada” su camiseta en el mítico Palacio de los Deportes de Madrid.

Valga este artículo, muy “wikipeado” para rendir homenaje a uno de los jugadores que más ha dado al baloncesto español, al que todo aficionado debía rendir pleitesía.

Gracias, Rudy.

foto de Eurohoops

Javier Romo Berlana

Administrador