octubre 9, 2024

¿Herida de muerte? 

0

Hace unos días el presidente del Girona Basket;  Marc Gasol reflexionaba sobre el estado actual del baloncesto patrio. Estas declaraciones, las hizo al hilo de una entrevista al seleccionador nacional Sergio Scariolo, en ellas el entrenador de nuestra selección mayor decía lo siguiente: 

“Estamos en el momento más difícil desde 2009. Es una situación de emergencia. Me gustaría revertir la tendencia de la importancia del jugador español, que ha llegado a datos preocupantes. De los primeros 50 jugadores en minutos y valoración en la ACB sólo hay tres o cuatro españoles. En 2009, cuando llegué, eran tres o cuatro veces más. Son los datos más bajos de todas las Ligas europeas”.  

Gasol estaba de acuerdo con la sentencia del italiano y añadía que, la preocupante fuga de talento hacia la NCAA .Debido al cambio de reglas económicas ,que permiten a las universidades fichar ofreciendo salarios superiores a los que las promesas del baloncesto nacional percibirían  en cualquier competición de nuestro país fue uno de los motivos al que hizo referencia el ex pívot internacional para explicar las palabras de Sergio. Marc también hizo un poco de autocrítica y dejó un mensaje claro a todos los dirigentes de la ACB: “Los clubes somos responsables de darle oportunidad a los jóvenes”  Ante esta realidad me gustaría recoger el guante imaginario que dejaron ambos en el aire y hacer también una reflexión, tal vez desde otro punto de vista.

Predicar con el ejemplo 

Lo que en un primer momento podía parecer un mea culpa” en toda regla, si ahondamos un poco más veremos que hay cosas que no nos cuadran. Sólo hace falta repasar la plantilla del año pasado del Girona Basket para darnos cuenta que el señor Gasol soltó esas declaraciones para galeria y para que los allí presentes le diesen un aplauso de gratis. ¿Por qué decimos esto?  Muy sencillo. De los doce jugadores que militaron en la 23/24 en el club gironi sólo tres eran españoles y ninguno de ellos estaban por debajo de los 25 años. Obviamente esto no se circunscribe al club catalan, la presencia de U-22 nacionales en los equipos ACB es casi testimonial (cupos necesarios) o directamente nula porque los cupos son de otras nacionalidades. Todo el mundo quiere competir, todo el mundo quiere ganar, eso está claro y  nadie va a cambiar ese axioma. Lo que realmente me llama la atención es:  que se diga que la responsabilidad es de los clubes, pero pocos o ninguno de ellos la acepta y se pone manos a la obra para evitar esa fuga de talento de la que todos hablan.

Selección: Escaparate que no ayuda

Haciendo un poco de revisionismo histórico nos encontramos con que los datos son demoledores. La edad de debut en la selección absoluta de la generación dorada estuvo comprendida entre los 19-22 años e incluso antes como es el caso de Ricky Rubio (con 17) .  En los últimos tiempos, quitando alguna excepción como la de Juan Núñez, la entrada a un convocatoria para un torneo internacional se produce mucho más tarde. El proceso se ha ralentizado por el motivo que sea, derivando a la a la llamada “ad eternum”  de ciertos jugadores año tras año. No es que dudemos de la calidad y de la importancia de los veteranos, pero sinceramente, hay puntos de la gestión actual que no sorprenden.  Cualquier selección del mundo que cuente en un mvp de un campeonato del mundo junior se plantearía incluirlo aunque sea como el 12 de la rotación en sus próximos campeonatos, pues bien, España no. Mientras que la carencia de 5 es evidente, Izan Almansa sigue jugando el torneo de La Línea de la Concepción. Hemos preferido nacionalizar a un base en lugar de darle la manija a Alberto Diaz (que no es santo de mi devoción) acompañado  por Juan Nuñez  y Sergio de Larrea. ¿Para ser el 7 séptimo jugador de la rotación exterior no nos vale Mario Saint-Supery?. Parece que no, que las opciones son otras. Si nuestros jóvenes talentos no pueden fraguarse en la selección y no tienen cabida en los equipos ACB ¿ Como no va estar nuestro baloncesto herido? 

A modo de conclusión: Lanzar advertencias, declarar y poner en conocimiento de todos lo que ocurre está muy bien, pero hacerlo sin tener ninguna solución en la mano como diría un argento: Es hablar al pedo”.  Si, el baloncesto español tiene una herida abierta y nadie parece poder o querer cerrarla. Si no se cierra rápido podríamos llegar a la infección y de ahí a un fallo sistémico que estoy seguro que nadie quiere que ocurra.

Imagen : Unplash 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *