Memorias de Atenas
El Baskonia viaja a Bolonia para jugar el viernes (20:30) el partido que definirá su posición final en la temporada regular de Euroliga, y sus opciones de clasificación para el playoff.
Otra última jornada. Otro partido en una cancha hostil. Otra vez el que el Baskonia se juega su porvenir en la máxima competición europea en un partido a cara de perro con muchas cosas en juego para los 2 equipos.
La única diferencia respecto al año pasado es la implantación del play-in, ya que, de no existir, el partido contra la Virtus de Bolonia sería tan decisivo como el del año pasado en El estadio de la paz y la amistad de Atenas, que dejó fuera a los de Joan Peñarroya después de estar en puestos de postemporada 33 de las 34 jornadas de Euroliga.
Play-in: ¿premio o castigo?
La introducción del play-in, ha provocado un cambio en la recta final de la liga regular respecto a los cursos pasados, más que nada porque al mantener a más equipos con algo por lo que luchar, prácticamente en todos los partidos hay algo en juego. Los partidos irrelevantes se han erradicado.
Por otra parte, genera un nuevo atractivo para la competición: una semana con tres partidos knockout en los que 4 equipos se juegan el todo por el todo en 40 u 80 minutos. El trabajo de toda la campaña apostado todo a un instante.
Tensión, drama, frustración e igualdad, ingredientes de primera calidad para satisfacer hasta los paladares baloncestísticos más gourmets.
La primera de muchas finales
Obviamente, hay una gran diferencia entre entrar séptimo o entrar décimo, y en esa tesitura se encuentran los dos protagonistas. Tanto Baskonia como la Virtus de Bolonia poseen el mismo récord (17-16), encontrándose 9º y 8º en la clasificación respectivamente, y aspiran a tener ese octavo puesto que te permite tener una oportunidad más para obtener una plaza de playoff.
El conjunto vasco viene de una épica victoria en Madrid, certificando así la presencia en play-in. En cambio, la Virtus perdió en la jornada anterior contra Milán, malgastando una bala para encarrilar esa 8ª posición.
Las cuentas de la última jornada
El Baskonia quedará 8º, 9º o 10º dependiendo de los resultados de la última jornada:
– Será 8º si gana en Bolonia. Por lo tanto, jugaría el martes siguiente en Belgrado contra el Maccabi Tel Aviv (7º) por la 7ª plaza. En caso de perder el martes, tendría la oportunidad de jugar en casa por el último puesto de playoff el viernes, contra el ganador del partido entre el 9º y el 10º.
– Será 9º si pierde y pierde el Efes contra el Estrella Roja. Entonces, Baskonia tendría que jugar en el Buesa Arena el martes contra el 10º, y en caso de ganar, se jugaría la 8ª plaza fuera de casa contra el perdedor del Maccabi-Virtus (duelo entre 7º y 8º)
– Será 10º si pierde y gana el Efes. En este caso, el equipo vitoriano tendría que ganar sendos encuentros fuera de casa (contra el 9º y el perdedor del 7º vs 8º) para obtener la ansiada plaza de playoff.
Precedentes y bajas
El choque del año pasado en la capital de la región de la Emilia-Romaña, se saldó con derrota baskonista, 88-83. Asimismo, en la 1º vuelta, el partido cayó del lado italiano con un resultado de 81-91, con un gran partido de Marco Bellinelli. En el choque de esta semana, el -10 de average no tendrá ninguna importancia ya que, al tener el mismo balance, la batalla del viernes romperá las tablas.
La escuadra gasteiztarra cuenta con la baja de Diop y la duda de Vanja Marinkovic, que causó baja en la derrota en Valencia del equipo este domingo, por molestias en la pierna izquierda. Los italianos, por su parte, tampoco contarán con Cacok, y podrían recuperar a Isaia Cordinier, uno de los jugadores estrella de la Virtus de Banchi, todavía duda.
Imagen de Baskonia, vía Twitter