Pecados de juventud

En una mala e inocente segunda parte Udea deja escapar el partido y termina cayendo por 72-83.

Ambiente inmejorable en el pabellón e inmediaciones del mismo, la gente no ha fallado, uno de los principales colaboradores del club, Grillaera/La Pxta Calle, han aportado una cantidad de caretas de los jugadores para más identificación grada/equipo, y eso unido a los aplaudidores de la Peña ha formado un espectáculo de color que lo cubría todo, los prolegómenos no han podido ser mejores…

El partido comienza a una velocidad para la que el adjetivo “frenética” se queda corta. Era como si fuera un reglamente en el que los ataques no pueden durar más de 10 segundos, y aunque no era la idea inicial de Udea, se supo adaptar bien a lo planteado.

Y en partidos así tienen a un jugador diseñado para eso, Jere Vucica, quien fue el máximo sustento en la primera mitad del cuarto. 

Primer cuarto digno de una eliminatoria como esta, jugadas para enmarcar, defensas de gran nivel y un ritmo más propio de la NBA que de un Limoges Olimpiakos de mediados de los 90.

Se ve que en el descanso entre cuartos Bozidar Maljkovic pegó un telefonazo y se empezó a jugar a algo totalmente diferente, ataques más largos, juego mucho más trabado y una cantidad de tiros libres que iba a determinar en gran parte el devenir del resultado al descanso 

37-33 al descanso con una comodidad mayor a la esperada por los locales.

Udea debió pensar que el segundo tiempo era de prueba, craso error propio de niños, porque salió absolutamente dormido, 3-15 de parcial visitante y jugando de manera mucho más inteligente, los árbitros, con algunas decisiones más que discutibles, dejaban contactos y ellos lo entendíeron mucho mejor.

Hay que dedicar unas líneas al tema de los tiros libres, fallar 13 libres de 35 intentados en unos playoffs de ascenso no es de recibo, especialmente sangrante en este aspecto fueron las figuras de Arnorld y Sami Eleraky; meter entre ambos solo 5 libres de 14… en fin, ahí se van algunas posibilidades de engancharse al partido.

Porque los triples pueden entrar o no, alguno se puede decidir mal y bueno, es parte del juego, pero para tener el lujo de fallar tantos libres tienes que ser Shaq, y aquí el no está, y aun así a él también se le atizaba lo suyo por eso…

No hay que rasgarse tampoco las vestiduras, Udea ha jugado muy buenos minutos, un partido en conjunto muy aseado, con algunos contraataques por parte de Sergio Cecilia, de quien se viene hablando mucho en la segunda parte de la temporada y quien se ha ganado a la afición, dignos de ser recordados, con unos mates verdaderamente espectaculares, que esas cosas también suman un extra para el gran público y además no se le ha perdido la cara al partido ni un solo segundo. Pero un tercer cuarto tan aletargado te pasa factura y más contra un equipo que comenzó en ese momento a meterlas como si el aro fuera de un metro de diámetro.

Quizás de lo más achacable, especialmente en el último periodo, fue que en esa lucha por reengancharse al partido y tratar de dejar aquí la victoria, el equipo se desmontó un poco, no llegando a ser pollos sin cabeza, pero sí como un poco de sensación de falta de gobierno en la pista, cosas que pueden pasar a un equipo que lleva inmerso tantas jornadas en una pelea tan fuerte por la supervivencia y que ahora está en una situación que, aunque soñada, ya había dejado de estar en los planes.

El resultado final de 11 puntos de desventaja en este ¨partido a 80 minutos” nos deja vivos. Estamos a fin de cuentas en el descanso, con un hándicap, eso es evidente, pero con posibilidades de dar un sorpasso en tierras catalanas.

Y lo que debe quedar claro, nítido, es que este equipo y este club se merece un aplauso de pie y corear su nombre de manera unánime, pase lo que pase el sábado, porque lo que se ha logrado desde noviembre es para no olvidarlo, porque todos han dado un paso adelante y han sido los mejores jugadores que tenían dentro de ellos y porque lo que nos han comenzado a mostrar un apasionante camino para recorrer la temporada que viene.

DAMEX UDEA ALGECIRAS (21+16+18+17):  Cecilia (15), Orrit (5), Balastegui (7), Vucica (14), Fercho (-), Arnold (7), Rodríguez (8), Eleraky (5), Berni (6), Revilla (2), Thiam (3) y Chernodolia (-).

CB PRAT (19+14+29+21): Stegemeijer (4), Soumbey (6), Martin (7), Taiwo (12), Salvans (2), Sese (11), Cartaino (11), Carrasco (18), Arques (10) y Ordóñez (2).

Arbitros: Cristian Meira Gonzalez y Francisco Olmos Ochoa.

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