Un gallego de aúpa
Supongo que todos los que formamos este bonito y bendito proyecto nos merecemos un aplauso. Bueno… Realmente ellos que me soportan mis estados de ánimo. A veces de risa, otras de tormento. Pero quizás lo bello es eso.
Mantener una web, sin publicidad, sin ingresos, sin que nadie se lleve un euro al bolsillo, sino al revés. A veces hay que cubrir pagos y uno llama y la gente apoya al minuto. Y así es una gozada.
Hablaría de todos ellos. De Álvaro, Víctor, Yus, Jaime… y un largo etcétera que llegaría a 27 personas que hoy forman Basket Pasión después de la entrada de Estefanía.
Pero dejarme que me pare a destacar la belleza de una persona que lleva con nosotros desde principio del proyecto y aún recuerdo que me decía que buscaría a alguien porque él no se veía. Y al final aceptó el reto de escribir para Basket Pasión todo lo referente a Monbús Obradoiro.
Y se trata de mi amigo, porque ya lo es, Toño. Un tío puro compromiso. Un tío que jamás ha puesto una mala cara. Que invita a los recién llegados a una cerveza de esa rara que hay en Galicia.
Un tío que cuando he llamado me ha respondido y me ha atendido. Y es que vive el baloncesto desde muy dentro y no sé si Basket Pasión le ha hecho algún bien. Pero él sí ha hecho mucho bien a Basket Pasión.
Comprometido hasta aceptar responsabilidades más amplias. Y sé que es de esas personas que cuando no tiene tiempo, se agobia porque sabe que lo necesitamos pero sus quehaceres no le permiten estar. Eso es de caballeros.
Voz taimada, con acento gallego, que creo que me definió como intenso. Que prefería “mis programas de radio” antes que otros más profesionales.
Y realmente creo que cuando creamos Basket Pasión, jamás imaginamos el carácter humano de la web en sí. Porque eso es brutal. Y un claro representante de lo que digo es Toño.
Casado (creo), con hijos, su trabajo, sus acciones sociales y, el cabrón, todavía saca tiempo para decir donde está su Obradoiro.
Toño, hoy desde aquí, siempre… Gracias.
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