Duelo sin red en el Gran Canaria Arena

Foto: ACB Photo
Este miércoles, el Hiopos Lleida viaja a Las Palmas para disputar el partido aplazado de la jornada 27, un reto de altura en el majestuoso Gran Canaria Arena. Ya sin el peso de la urgencia ni el vértigo de la clasificación –con la permanencia sellada de forma matemática tras una temporada de coraje y épica–, los de Gerard Encuentra se miden a un Dreamland Gran Canaria que aún pelea por blindar su plaza de playoff. Dos equipos con horizontes distintos… pero con el mismo objetivo en la mente: competir hasta el último segundo.
Sin miedo
No es la primera vez que los ilerdenses miran a los ojos a un gigante. De hecho, en la ida en el Barris Nord, Lleida ya dejó claro que no le teme a nadie. Aquel 88-78 fue un golpe sobre la mesa: intensidad, defensa, verticalidad, y un pabellón entregado que empujó cada balón como si fuera el último. La presión a toda pista y el dominio del rebote fueron claves ante un Gran Canaria superado en todas las fases del juego. “Nos faltó dureza y claridad en defensa”, reconoció entonces Jaka Lakovic. Una herida aún abierta para los canarios, que buscarán esta vez redimirse ante su gente.
Identidad sin renuncias
En la previa, Gerard Encuentra lo tiene claro: “Será un partido muy exigente. Gran Canaria en casa es especialmente peligroso. Si cometemos errores, los pagaremos caros”. Pero el técnico no renuncia a nada: con la permanencia en el bolsillo, el Hiopos Lleida viaja sin presión… pero con la misma hambre de siempre. “Queremos hacer un buen partido, competir con nuestra identidad y ponerles en problemas. Sabemos que si hacemos las cosas bien, podemos lograrlo”.
El Dreamland, por su parte, llega con urgencias. Tras caer ante Valencia, Lakovic ha hecho un llamamiento a la afición para llenar el Arena y volver a la senda de la victoria. No puede permitirse más errores si quiere mantener viva la ilusión del factor cancha en la postemporada.
Lleida, mientras tanto, quiere seguir creciendo. Sin cadenas, sin miedo y con ese espíritu que le ha acompañado toda la temporada: la osadía de los que no tienen nada que perder y la fuerza de los que ya han demostrado que merecen estar entre los mejores.
Una vez más, el Hiopos Lleida va a escribir en mayúsculas su nombre en esta Liga Endesa. Aunque no haya épica clasificatoria en juego, cuando suene el balón en Las Palmas, este equipo volverá a demostrar quién es. Y cómo compite.
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