El ingrediente para la receta del éxito

Esta semana el Estudiantes ha recibido numerosas críticas por disputar el primero de los duelos por el ascenso ante Leyma Coruña en el Magariños, pero que mejor lugar, la casa del club, para disputar este tremendo partido. Los dos equipos con aspiraciones al ascenso directo se cruzan pronto para verse las caras de nuevo tras el año coruñés en ACB.

Los fantasmas del pasado no se pueden olvidar, y por ello entra el miedo en el cuerpo de los estudiantiles al recordar lo vivido hace dos temporadas, precisamente también en el Magariños, donde el Estu cayó tras un partido con una polémica tremenda y un final polémico también. Ha llovido mucho, las plantillas son totalmente diferentes, y por eso se vivirá un ambiente mágico en uno de los templos del baloncesto español.

Traje y corbata aún más caros

Si para el duelo contra Obradoiro Toni Ten decía que había que llevar traje, corbata, y colonia de la buena, ahora hay que llevar los más lujosos del mercado, los más caros, porque el nivel del partido lo debe, el primero de los duelos por el ascenso.

El Estu tiene que dejarse de tonterías, jugar a la capacidad que tienen, e incluso más, otra derrota como la de Obradoiro no se entendería, son errores de concentración, y la experiencia de la plantilla debe frenar esos momentos. Victorias como la última en Cartagena, imponiéndose desde el primer cuarto, y enseñando la faceta defensiva, son las que tienen que hacer que los jugadores salgan motivados a la pista.

La clave se basa en un nombre que lleva estando en la palestra varias jornadas, Jayson Granger. Este es uno de los partidos en los que debe aparecer como líder, como mejor jugador de la categoría, y como alguien que lleva al Estu en la sangre y tiene entre ceja y ceja el ascenso. Jay se perdió el duelo ante Cartagena por un proceso gripal, y tanto cuerpo técnico como afición esperan que no se pierda el encuentro en Magariños, porque tendrá que asumir galones.

Es un partido para que todos tengan el día, que Silverio no se vuelva loco y busque tiros fáciles, que Salin enchufe desde tres como lleva haciendo toda su carrera, y que Filipovic, que recibe a uno de sus antiguos equipos, siga haciéndolo igual de bien que toda la temporada. Espacio aparte para Tanner McGrew, que puede ser alguien  que no se nombre mucho, pero es otra de las grandes piezas del equipo, pues castiga desde fuera y captura rebotes, eso sí, para partidos como el del domingo hay que darle un tranquilizante, quedan avisados.

Y es que esto es más ofensivo, pero donde reside una de las oportunidades de llevarse el encuentro es en la defensa, ante un Coruña anotador, y ahí también han de aparecer varios nombres.

Por fuera, Lucas Giovannetti, a quien parece que Toni Ten le reserva una faceta más defensiva por su energía y su rapidez, y son estos partidos los que curten a jugadores jóvenes como Lucas. Junto a él, Garino tiene que sentar cátedra desde su triple hasta esa intimidación y pesadez en defensa, pues ha sido uno de los encargados de defender al mejor anotador de los equipos rivales hasta la fecha. Por dentro, no hay duda, la dupla formada por Nwogbo y Brimah, dos intimidadores natos, el primero por su físico y el segundo por su envergadura, que tienen que hacerse dueños y señores de la zona desde el primer minuto.

Renovación integral para el invicto

Tras su corta travesía en ACB, el Leyma Coruña está de vuelta en LEB Oro, donde es uno de los clásicos, y lo hace con un proyecto de grandes nombres tras cambiar al completo su plantilla, reforzándose con jugadores de talla ACB y otros con experiencia y galones en la liga que aspiran a abandonar.

Todo equipo debe tener una cabeza pensante, y después de la marcha de Epi, el encargado de llevar la pizarra coruñesa ha sido Carles Marco, que viene de ser importante asistente en equipos Euroliga como Estrella Roja, Barça, o París. Además, ya se le conoce por las canchas de la LEB, pues fue jugador, y como entrenador dirigió a Oviedo, Palencia, y Girona.

Una buena cabeza pensante para dirigir a un conjunto que se mantiene como único invicto de la liga tras seis jornadas, aplastando en la última al Fuenlabrada en el Coliseum, por lo que demostraron que no se achantan ante los grandes.

La plantilla puede ser, junto con la del Estu, la mejor de la liga, han sabido armar un buen equipo en todas las facetas, y aunque sea totalmente nuevo, se complementan de maravilla. En el exterior hay nombres clave de LEB Oro, que se las saben todas, hablamos de Didac Cuevas y Caio Pacheco en el puesto de base, dos manejadores de categoría que aportan tanto en ataque como en defensa. A ellos se unen dos francotiradores con descaro, Joe Cremo tras su estancia en Burgos entre Tizona y San Pablo, y Paul Jorgensen, cara conocida en el Estu, que habrá que vigilar de cerca y atosigarle para que no anote a su ritmo.

Respecto al juego interior, aunque muchos de ellos salen por fuera, el Coruña ha apostado por combinar el alto nivel en LEB con piezas de Liga Endesa. Su última incorporación, Dino Radoncic, ya dejó buenas sensaciones con Betis el año pasado, y es un jugador que sabe buscarse bien las castañas. Danilo Brnovic, tras pasar por Zornotza y Podgorica, está aportando con su buena muñeca y cogiendo rebotes, y Guillem Jou, histórico del Manresa, se encarga de la faceta más anotadora. Abdou Thiam, desde Tizona, e Ilimane Diop desde ACB, son las referencias en la zona, y aunque aparentemente no sean nombres que asusten mucho, son peleones y pondrán las cosas difíciles.

En definitiva, nos espera un autentico partidazo, el mejor de esta temporada, y que mejor que vivirlo en el Magariños. Concentración desde el primer momento, pisar el acelerador los 40 minutos como ya saben hacer, y combinar el ataque con la defensa, estas son algunos de los muchos aspectos que habrá que controlar para ganar un partido de vital importancia.

Autor: Rubén Moncayo