El Covirán se queda sin gasolina en Andorra

El Covirán Granada rozó la sorpresa en el Pavelló Toni Martí, pero terminó cediendo ante el MoraBanc Andorra (86-81) en un duelo directo por la permanencia. Con una rotación mínima y condicionado por las bajas, el conjunto rojinegro sostuvo el pulso durante tres cuartos, aunque acabó pagando el desgaste físico frente a un rival que encontró en Shannon Evans al factor decisivo.

Nazaríes a fuego

El partido nació torcido para los de Ramón Díaz incluso antes del salto inicial. A la ya conocida plaga de lesiones se sumó la ausencia de Amida Brimah, obligado a abandonar la concentración para asistir al nacimiento de su hijo, dejando a Babatunde Olumuyiwa como único pívot disponible. Aun así, el Covirán salió sin complejos y compitió de tú a tú desde el primer minuto.

Andorra buscó imponer su físico en la pintura con Artem Pustovyi, autor de los primeros puntos locales, pero el Granada respondió con orden y criterio. Lluís Costa manejó los tempos y Olumuyiwa sostuvo el pulso interior, permitiendo a los rojinegros llevar pequeñas ventajas. El intercambio de golpes fue constante y el primer cuarto se cerró con igualdad absoluta (22-22).

En el segundo periodo, el MoraBanc encontró oxígeno desde el perímetro para abrir una renta de cinco puntos, aunque la reacción granadina fue inmediata. Luka Bozic comenzó a marcar diferencias con su verticalidad y Matt Thomas aportó acierto exterior en momentos clave. Un parcial favorable devolvió el mando al Covirán, que además supo sacar rédito de su agresividad atacando el aro para marcharse al descanso con ventaja (42-47).

Evans decide y el esfuerzo no alcanza

Tras el paso por vestuarios, el guion cambió por completo. Shannon Evans asumió el protagonismo y comenzó a castigar sin piedad a la defensa visitante. Dos triples consecutivos del base, unidos al acierto de Stan Okoye, voltearon el marcador y obligaron a Ramón Díaz a pedir tiempo muerto.

El Covirán empezó a notar el peso de los minutos. Bozic y Thomas mantuvieron con vida a los rojinegros a base de talento individual, pero el juego se volvió más precipitado. Evans firmó un tercer cuarto sobresaliente, permitiendo a los locales cerrar el periodo por delante (68-65).

En el último acto, el cansancio pasó factura. Pons y Pustovyi ampliaron la ventaja andorrana mientras el Granada ya jugaba al límite de sus fuerzas. Aun así, el equipo no bajó los brazos y llegó a colocarse a solo dos puntos en los instantes finales. Sin embargo, una canasta decisiva de Evans terminó por sentenciar el encuentro. La frustración se reflejó en la descalificación de Ramón Díaz por doble técnica tras una acción protestada en los segundos finales.

Ficha técnica

Árbitros: Óscar Perea, Rafael Serrano y Rubén Sánchez Mohedas.

MoraBanc Andorra 86 (22+20+26+18): Evans (27), Best (0), Okoye (12), Pons (8), Pustovyi (12) – quinteto inicial – McKoy (6), Kuric (14), Udeze (2), Rafa Luz (1), Ortega (2), Bassas (0), Guerrero (0).

Covirán Granada 81 (22+25+18+16): Costa (11), Thomas (20), Munnings (2), Bozic (24), Olumuyiwa (11) – quinteto inicial – Edu Durán (0), Howard (3), Rousselle (4), Burjanadze (6), Pere Tomàs (0).

Pabellón: Pavelló Toni Martí (2.934 espectadores).
Incidencias: Eliminado Howard por cinco faltas personales. Ramón Díaz descalificado por doble técnica.

Autor: Salvador Rovira

Fotografia: Salvador Rovira/salvaphoto.raw