El día de la marmota

El Grupo Caesa FC Cartagena CB vuelve a firmar una derrota, esta vez en casa y esta vez ante el Grupo Alega Cantabria por 68-74, la octava consecutiva, novena si contamos la eliminación de copa. Una derrota que volvió a dejar el mismo sabor de boca demasiado conocido en lo que va de temporada. Una nueva derrota que solo sorprende por las formas, que vuelve a constituirse de los mismos errores de los que ya he hablado aquí jornada tras jornada: falta de acierto y organización. Pareciera que cada jornada, al terminar, se rebobina y volviera a empezar con el mismo guion que la anterior.

¿Qué esperar?

El partido comenzó siendo algo diferente a lo que veníamos viendo hasta ahora. El equipo ciertamente estuvo bastante más acertado en defensa que en las jornadas anteriores y también hay que contar con la falta de acierto anotador del Grupo Alega Cantabria, pero aun así se seguían viendo los fantasmas del pasado. Un juego en ocasiones excesivamente estático, y sin soluciones colectivas que empujaban inexorablemente a actuaciones individuales forzadas que raramente acababan en éxito. Especialmente a destacar el lanzamiento exterior con un paupérrimo 3/18, un 16 % de acierto y bastante maquillado, ya que las dos últimas jugadas del equipo albinegro fueron anotaciones de tres.

Se nota que hubo esfuerzo y ganas y que el equipo, los jugadores, querían demostrar ante el público que había ganas de llevarse la victoria. 44 puntos fueron desde la pintura y también cabe recalcar el trabajo de los que fueron rotando desde el banquillo, que anotaron 39 puntos, pero todo eso se diluyó otra vez en el tramo final del encuentro, de forma muy similar a lo que ocurriera hace unos días en el partido ante Palmer Basket. La desconexión, las prisas y los errores defensivos condenaron un partido que hasta el minuto 3 del último cuarto contaba con la ventaja local.

Esta situación anunciaba que se volvería insostenible y no creo que me equivoque cuando digo que estamos en esa fase. Anoche el Palacio contó solo con 1700 espectadores, quizá porque era un día entre semana o quizá por el mal tiempo que no acompañó, pero la realidad es que pareciera que cada vez hay menos afluencia al Palacio y que quien acude cada vez lo abandona antes. El equipo necesita apoyo y siempre lo tendrá, pero también hay que entender que una parte de la afición se sienta cansada, cansada de perder cada jornada y además cansada de perder de esa manera. Y eso se notó en el ambiente de los que allí había: la alegría duraba poco, una de cal y otra de arena. Cuando el equipo cartagenero hacía alguna jugada o se acercaba en el marcador, volvía a caer desesperadamente en la misma cuenta de errores y volvía a distanciarse. Supongo que la gente ya sabe cuál va a ser el desenlace de este guion antes de verlo.

Un peso cada vez mayor

Anímicamente no tengo la seguridad para hablar de cómo están los jugadores; solo puedo guiarme por gestos y sensaciones vistas en la pista, pero dudo mucho que todo sea jolgorio y alegrías. Cada derrota suma una losa más pesada que la anterior a una mochila ya en punto de quiebre. Y esto, claramente, tiene su reflejo en la pista; quizá la necesidad imperiosa de una victoria sea lo que lleva a cometer esos errores y terminen perjudicando más de lo que ayudan. En las gradas, junto con el silencio, reinan también susurros que juzgan y señalan culpables, algo natural en cualquier equipo con esta dinámica. Un debate que ya está abriendo tertulias en los medios locales. Desde el club lo que encontramos son las disculpas a la afición por la imagen que da el equipo y la petición a todos los aficionados de no abandonar al club ahora cuando más les necesita, algo que desde aquí apoyo fervientemente, pero no peco de ingenuidad al saber que quizá haya aficionados que, viendo el desarrollo, prefieran hacer cualquier otra cosa antes que revivir el mismo día en cada encuentro en el Palacio. Esto no es más que una erosión progresiva que poco a poco va desgastando más a todos.

Pero no todo será malo, las cosas aún pueden tornarse un tanto peores. Las arenas del tiempo no cesan y del mismo modo la liga tampoco y, tras el encuentro de ayer miércoles, nos espera otro en casa este sábado, nada más y nada menos que nos visitará el Leyma Coruña, actual líder de la categoría y club con bastantes papeletas de ser el elegido para ascender a Liga Endesa y que para más inri aún está invicto en la categoría. Ciertamente el horizonte del Cartagena no se dibuja con un amanecer, aún no al menos. Un rival que sin temor a equivocarme mantendrá al equipo en su particular bucle.

Otro partido en casa, otra oportunidad. Este sábado a las 19:00, Grupo Caesa Seguros FC Cartagena CB – Leyma Coruña, con solo una pregunta en mi cabeza: ¿Qué puede pasar ahora? ¿Cuándo saldremos de esta situación? Por ahora solo tengo una respuesta: El día de la marmota continúa.

Ficha técnica:

Grupo Caesa Seguros FC Cartagena CB (10+20+17+21): Davis (14), Polynice (6), Garuba (5), Rivera (2), Martin (0), Webster (2), Idehen (2), Domenech (9), Faverani (18), Hardinguey (0), Svejcar (10).

Grupo Alega Cantabria (16+18+12+28): Powell (10), Rodriguez (7), Lugarini (0), Martinez (4), Yu (13), Aldrete (8), Hernandez (8), Lutete (2), Johnson (18), Kande (4).

Autor: Abraham Gallego

Foto RRSS Grupo Caesa Seguros FC Cartagena CB