¿Bálsamo para las heridas?

Los últimos acontecimientos en la familia del CB Morón no han sido ni mucho menos positivos, a la derrota frente al CDH, tenemos que añadir la suspensión del encuentro que se debía disputar el pasado martes contra Huelva Comercio. ¿El Motivo? Las molestias de gran parte de la plantilla naranja, debido a la carga de trabajo y a la sucesión de partidos, hubieran sido 3 partidos en 5 días y obviamente la salud y el bienestar de los jugadores están por encima de cualquier otra cosa. Con estos antecedentes el sábado 23 a las 17 horas el Alameda volverá a abrir sus puertas para acoger a su equipo, que recibirá al Coto Córdoba Club Baloncesto conjunto que esta temporada está enclavado en el grupo Db de la liga EBA.
Cazando en el Coto
La mayoría de los lectores no conocerán muy bien a los cordobeses, es normal, el club de la ciudad de la mezquita militaba la pasada campaña en la 1N Andaluza y a pesar de una temporada irregular consiguió su ascenso a EBA por la vía administrativa, será por lo tanto su debut en la categoría. El proyecto cordobesista es ambicioso cuanto menos, han fichado a jugadores de garantía para dar el salto a la LEB Plata, cosa que intentaron el año anterior, postulándose por una plaza en la citada competición que finalmente no les fue concedida. Córdoba Baloncesto tiene un roster que puede engañar a primera vista, plagado de nombres desconocidos para el gran público, pero con amplia trayectoria en competiciones FEB, si a eso le añadimos los fichajes de CJ Wiliamson y Maxi Andreatta, podemos estar ante uno de los grandes animadores de la competición. Precisamente en estos dos jugadores y en el canterano de Unicaja Lucas Muñoz vamos a poner el foco, puesto que son a priori los llamados a ser los lideres de este Coto Córdoba Baloncesto.
Lucas Muñoz: El canterano de Unicaja vuelve este año a su tierra después de muchos años lejos de ella. El base nacido en La Rambla es un viejo conocido de los sevillanos ya que jugó contra ellos en las temporadas 19-20, 20-21 y 21-22 vistiendo la camiseta del CB Marbella. Un jugador distinto, con un talento natural que lo llevó a debutar en ACB, rápido leyendo el partido y un penetrador excepcional. La última temporada también estuvo en Marbella, en esta ocasión en EBA, donde firmaría 13 puntos, 3 asistencias y 4.7 rebotes
CJ Wiliamson: La gran incorporación de los cordobeses, el fichaje que esperan que les de el salto de calidad necesario para disputar la EBA. El alero nacido en Alabama viene directamente de la NCAA, siendo pieza clave en los UAH Charguers. C J ya ha dado muestras esta pretemporada de lo que es capaz de hacer consiguiendo 20 puntos en su primer partido en España frente a Andújar. Estamos ante el típico jugador norteamericano; fuerte, potente, con buena capacidad anotadora y posiblemente capaz de jugar en varias posiciones gracias a sus 200cm de altura. En su último año universitario promedió 9.5 puntos 2.7 rebotes y 1.9 asistencias.
Maxi Andreatta: La montaña que se divisa al fondo del coto, con sus 211 cm será el techo de los cordobeses y yo apostaría que uno de los jugadores más altos de su grupo, si no el que más. Este argentino de 24 años, vivirá en tierras andaluzas, su primera experiencia lejos de su país. El pívot chaqueño, se formó como jugador en el Regatas Resistencia, el club de su ciudad natal, de ahí pasaría al Regatas de Corrientes para terminar su formación en la NJCAA y la NCCA. Su etapa profesional siempre ha estado ligada a la provincia de Corrientes, jugando en San Martin primero y luego en Comunicaciones club con el que disputó la pasada edición de la primera división argentina. Sus números son discretos 1.9 puntos, 2.4 rebotes y 0.6 asistencias, pero nos se lleven a engaño, junto a Lucas pueden ser una de las parejas del año en la EBA.
Morón buscando soluciones
Esta semana sin partidos ha tenido que servir para analizar, asimilar e intentar subsanar, en la medida de lo posible, los errores cometidos contra el CDH. Santaella y los suyos seguramente habrán encontrado esos errores y saldrán si cabe, con las cosas más claras, además tener un tiempo largo para seguir trabajando automatismos puede ser muy positivo de cara al partido del sábado, que, aunque sea ante un rival teóricamente inferior se puede complicar. Morón vuelve a casa esperando que Alameda sea una cura para las heridas, ese empujón anímico que les ayude a afrontar los próximos compromisos y preparar lo que se viene. Recuerden sábado 17 horas en el pabellón Alameda vuelve a jugar la “legión naranja”
Fotografía : Twitter C B La Palma
