El Hiopos Lleida vence al Girona

El Palau d’Esports de Catalunya fue, este jueves, un escenario cargado de emociones encontradas para el Hiopos Lleida. Los de Gerard Encuentra consiguieron imponerse por 67-70 al Bàsquet Girona, en un duelo intenso, áspero por momentos, que acabó siendo un pequeño premio sin billete a la final. Y es que, aunque el triunfo supo dulce en el marcador, el balance de -2 en el basket average cerró de golpe cualquier opción de pelear por el título. Una paradoja cruel: ganar y, sin embargo, quedar fuera.

Una victoria que llegó tarde para soñar

El choque arrancó con energía, pero también con las imprecisiones propias de una pretemporada en pleno rodaje. James Batemon, encendido desde el inicio, clavó dos triples seguidos que pusieron al Hiopos seis puntos arriba. Pero el Girona, con un Pepe Vildoza inspirado —tres triples consecutivos como un martillo pilón—, respondió con un parcial de 15-3 para voltear el electrónico (27-21). Fue un golpe que no tumbó a los ilerdenses, solo los obligó a apretar los dientes.

En el segundo cuarto, el duelo bajó revoluciones. Los dos equipos se enredaron en pérdidas de balón y tiros fallados, hasta que el Hiopos recuperó aire: un parcial de 2-8 y dos tiros libres de Oriol Paulí igualaron el marcador (30-30, min 16). La igualdad fue total: golpes tímidos, errores compartidos y un descanso al que ambos llegaron empatados (40-40) sin que ningún entrenador hubiera pedido un solo tiempo muerto. Esa calma tensa en las bandas decía mucho: nadie quería regalar nada, pero tampoco forzar demasiado en una competición donde el average decide destinos.

Batemon y Ejim, los héroes silenciosos del desenlace

La reanudación trajo el mejor momento del Girona. Un 5-0 de salida con Ferrando y Livingston adelantó a los gerundenses (47-42) y obligó a Encuentra a pedir su primer tiempo muerto tras ver el marcador en 53-46. Parecía que el partido se inclinaba hacia el lado local, pero el Hiopos se negó a rendirse. Ajustaron en defensa, apretaron el rebote y recortaron la diferencia hasta el 53-52 con el que se cerró el tercer cuarto.

En el último acto, los ilerdenses arrancaron con un parcial de 0-6 (53-58), pero pronto se quedaron sin ideas en ataque. El Girona reaccionó, empató (58-58) y el encuentro entró en territorio de infarto. Fue entonces cuando aparecieron los hombres que cambian partidos: Ejim, sólido y sereno, encadenó cinco puntos que pusieron el 65-68 a solo 12 segundos del final. Con la presión del público y el cronómetro agonizando, Livingston tuvo en sus manos el empate desde el perímetro… pero el balón rebotó en el aro.

El 67-70 final dejó al Hiopos Lleida con un sabor extraño: la satisfacción de vencer y la frustración de saber que el esfuerzo no bastó para seguir soñando en Tarragona. Aun así, este triunfo ante el Girona es un aviso para el resto: los de Encuentra no han dicho su última palabra. Puede que la final del domingo ya sea inalcanzable, pero la forma en la que el equipo resistió, supo sufrir y encontró respuestas en los momentos críticos muestra algo más importante que un trofeo de pretemporada: carácter. Y eso, a estas alturas, vale oro para lo que está por venir.

Ficha técnica

67. Bàsquet Girona (27 + 13 + 13 + 14): Needham (11), Hughes (3), Vildoza (11), Geben (5), Martínez (5) -cinco inicial-, Busquets (8), Ferrando (3), Livingston (12), Sanmartín (-), Chassang (-), Maric (7) y Susinskas (2).

70. Hiopos Lleida (21 + 19 + 12 + 18): Batemon (20), Walden (2), Ejim (15), Jiménez (-), Krutwig (2) -cinco inicial-, Pauli (10), Zoriks (4), Goloman (3), DIagne (2), Sanz (9), Shurna (3) y Llorente (-).

Árbitros: Jordi Aliaga, Arnau Padrós y Yasmina Alcaraz. Eliminado Geben por cinco faltas personales.

Incidencias: Partido correspondiente a la segunda jornada de la 46ª Liga Catalana disputado en el Palau d’Esports de Catalunya (Tarragona).

Autor: José Manuel Gómez

Foto: x (twitter) Hiopos Lleida