Faltó creer hasta el final

Hay derrotas que duelen y otras que enseñan. La de este domingo en el Espai Fruita Barris Nord pertenece a la segunda categoría. El Hiopos Lleida vendió cara su piel ante el Joventut Badalona, ​​luchó hasta el último aliento y dejó claro que este equipo no se entrega jamás. Pero la experiencia y la calidad de los verdinegros, con un Ante Tomic imperial (19 puntos, 27 de valoración), terminaron decidiendo el encuentro en los instantes finales.

Desde el primer minuto, el partido fue una batalla de voluntades. El Joventut salió con una intensidad feroz, como si quisiera sentenciar el choque antes de que los leridanos pudieran darse cuenta de lo que estaba pasando. En un abrir y cerrar de ojos, los de Dani Miret firmaron un parcial de 0-13 , dejando helado a un Barris Nord que, por un instante, temió lo peor. Gerard Encuentra, con la mirada afilada, pidió tiempo muerto. Sabía que su equipo no podía permitirse una rendición tan temprana.

Reaccionar a tiempo

Y como si de un ejército en retirada se tratase, el Hiopos se reagrupó, se levantó y contraatacó. Muric clavó un triple como quien planta una bandera en territorio hostil. Paulí le siguió con otros dos cañonazos desde el perímetro. Y cuando la Penya quiso reaccionar, ya era demasiado tarde: la máquina burdeos había cobrado vida. Batemon y Walden remataron la faena con dos triples que voltearon el marcador al final del primer cuarto (22-18, min. 10).

El segundo parcial fue un duelo de esgrima. Cada golpe del Hiopos encontró una respuesta inmediata del Joventut. El marcador oscilaba como un péndulo entre la igualdad y la mínima ventaja visitante (32-32, min. 15). Pero Tomic decidió que era su momento. Con una exhibición de movimientos en la pintura y una mano de seda, suma 9 puntos en un abrir y cerrar de ojos. Y el Hiopos, pese a su resistencia numantina, tuvo que ceder al descanso (40-45, min. 20).

La reanudación trajo consigo un nuevo estallido de carácter leridano. Dotson intentó tomar el control para la Penya con seis puntos consecutivos, pero el Hiopos respondió con un parcial de 8-0 que devolvió la ventaja a los locales y desató el delirio en Barris Nord (57-56, min. 25). El pabellón rugía, la afición creía, el equipo lo dejaba todo en la pista. Pero Devon Dotson , en una exhibición de sangre fría, asestó dos puñaladas en los últimos segundos del tercer cuarto para dar aire a los verdinegros (65-69, min. 30).

El valor de la experiencia

El último cuarto fue una guerra de desgaste. El Joventut subió una marcha más , aguantó su defensa y castigó cada error del Hiopos. En apenas cinco minutos, la distancia se fue hasta los 10 puntos (67-77, min. 35). Pero si algo ha demostrado este equipo es que no se rinde. Con más corazón que fuerzas, con más coraje que aliento, los de Encuentra intentaron una última embestida.

Paulí, Bozic y Batemon apretaron el marcador en los instantes finales, pero la experiencia de Tomic y los suyos fue suficiente para mantener la ventaja. El Hiopos cayó, sí, pero con las botas puestas. Y aunque esta derrota escuece, la sensación es que este equipo sigue creciendo. El camino hacia la permanencia sigue abierto.

Esto es baloncesto, esto es la Liga Endesa.

Ficha técnica

81 – Hiopos Lleida (22+18+25+16): Bropleh (-), Villar (4), Bozic (9), Madsen (-), Hasbrouck (-) – cinco inicial- Batemon (17), Walden (14), Paulí (12), Hamilton (3), Múric (9) y Oriola (13).

86 – Joventut Badalona (18+27+24+17): Kraag (5), Dotson (18), Dekker (10), Tomic (19), Hanga (19) -cinco inicial- Ribas (-), Pustovyi (4), Vives (-) y Robertson (11).

Árbitros: Óscar Perea, Jordi Aliaga y Cristobal Sánchez. Sin eliminados.

Incidencias: Partido correspondiente a la vigesimocuarta jornada de la fase regular de la Liga Endesa disputado en Barris Nord (Lleida) ante 5.712 espectadores.

Foto: X (tuitter) Hiopos Lleida