Reacción de carácter

El Hiopos Lleida encontró en Escaldes-Engordany el punto de inflexión que necesitaba. Después de dos derrotas en el arranque de pretemporada, el equipo de Gerard Encuentra remontó once puntos y conquistó por 83-87 el octavo Trofeu Escaldes-Engordany, demostrando que este grupo tiene orgullo, músculo y la cabeza fría para aguantar cuando el viento sopla en contra.

Del abismo al rugido: los de Encuentra resucitan en Andorra

La historia comenzó con sobresaltos. MoraBanc Andorra, liderado por un inspirado Shannon Evans II (18 puntos), parecía tener la noche bajo control. A mediados del tercer cuarto, el marcador mostraba un doloroso 53-42. La grada andorrana celebraba cada triple y cada asistencia como si la victoria estuviera asegurada. Pero el baloncesto, y este Hiopos, son especialistas en reescribir guiones.

Gerard Encuentra pidió tiempo muerto. En el banquillo, los rostros tensos se transformaron en determinación. Y entonces, como quien prende una chispa en medio de la tormenta, John Shurna clavó dos triples consecutivos. Fue el primer rugido de un equipo que se negaba a rendirse.

Ejim y Batemon, líderes en la tormenta

El último cuarto fue un duelo de nervios, músculo y fe. Melvin Ejim, con sus 18 puntos, asumió el papel de líder silencioso, ese que aparece en el momento exacto para sostener al grupo. James Batemon, autor de 15 puntos, manejó el balón como si el tiempo fuera suyo. Primero, un triple de Oriol Paulí, ex del MoraBanc, dejó un silencio incómodo en el pabellón (72-79). Después, un Batemon letal y un mate de Ejim a falta de 1’54” sellaron la remontada (81-86).

La técnica señalada a Encuentra encendió a los locales, que con un 2+1 de Evans llegaron a ponerse a un punto (81-82). Pero ahí se acabó su empuje. Los burdeos defendieron con uñas y dientes, apagaron las ideas andorranas y levantaron el trofeo.

En el vestuario, más que sonrisas, hubo alivio y complicidad. No fue solo una victoria de verano: fue un mensaje. Este Hiopos sabe sufrir, sabe levantarse y, sobre todo, sabe que cada pieza —de Ejim a Shurna, de Paulí a Krutwig— puede cambiar el rumbo de un partido.

La pretemporada continúa, pero en Escaldes-Engordany el equipo dejó claro que el carácter no entiende de calendarios ni de amistosos. La temporada en la Liga Endesa asoma en el horizonte, y los de Lleida ya han demostrado que, cuando parece que todo está perdido, son capaces de rugir más fuerte que nadie.

Ficha técnica

83- MoraBanc Andorra (17+20+29+17): Ferran Bassas (5), Best (15), ‘Chumi’ Ortega (4), McKoy (8) y Rubén Guerrero (2) -cinco inicial-; Shannon Evans II (18), Udeze (6), Rafa Luz (9), Yves Pons (6), Aaron Ganal (3) y Pustovyi (7).

87- Hiopos Lleida (20+16+22+29): Walden (5), Batemon (15), Oriol Paulí (6), Ejim (18) y Krutwig (7) -cinco inicial-; Zoriks (3), Atoumane Diagne (2), Millán Jiménez (6), John Shurna (14), Agada (4), Golomán (7), Mikel Sanz (-) y Sergio Llorente (-).

Árbitros: Leandro Lezcano, Alfonso Olivares y Joan Fanés. Sin eliminados

Autor: José Manuel Gómez

Foto: x (twitter) Hiopos Lleida