Sin guinda no hay pastel

Me tengo que comer mis palabras, en la crónica del partido frente al Obradoiro, partido que ganamos 77 a 78, dije que la cosa había cambiado y que este año habíamos aprendido a gestionar los finales de los partidos para poder cerrarlos con el broche de oro. Llevábamos unos años que cada vez que llegábamos a un final apretado con mucha seguridad perdíamos el partido.

Bueno, este sábado en el partido que nos enfrentaba en la decimocuarta jornada al Gran Canaria en su casa han vuelto las malas sensaciones ya que después de ir por encima prácticamente todo el partido y jugando de una manera muy seria no fuimos capaces de dar la puntilla, cosa que aprovechó el equipo local para hacer un buen parcial y llevarse la victoria con la que siguen aferrados a la lucha por una plaza en La Copa.

El primer cuarto estuvo bastante igualado, con los dos equipos bastante parejos en el acierto (50% contra 68.8%), rebote (8 contra 7) y asistencias (5 contra 6). El factor que hizo que nos fuéramos por delante en el marcador con un parcial de 19 a 25 fue exactamente el primero de los puntos que es el punto en el que el equipo entrenado por Jaume Ponsarnau lució más, tanto en los tiros de dos como en los triples.

En el segundo cuarto la dinámica fue similar, un intercambio de golpes entre los dos equipos en el que el porcentaje de acierto fue igual (43.8%) aunque consiguieron hacer un parcial de 23 a 18 para llevar el marcador al descanso en un apretado 42 a 43 gracias, sobretodo, al rebote ya que mientras que nosotros cogíamos 3 rebotes el equipo canario llegó a coger hasta 13, que para toda persona que le cueste las matemáticas la diferencia en el rebote es más del cuádruple.

Aun seguir el partido muy ajustado, en el tercer cuarto los hombres de negro fueron capaces de poner algo de tierra de por medio gracias al apartado defensivo y sacando 8 tiros libres de los que anotaron 7 (87.5%) para meter un parcial de 17 a 23 y dejar el marcador para el último cuarto en un “holgado” 59 a 66, que en principio parece una renta lo suficientemente cómoda como para, haciendo un último cuarto relativamente parecido a los anteriores, llevarnos el partido casi con seguridad.

Dejándonos los piños en el parquet de la hostia que nos dimos

No sé si es por si no creemos en la victoria, si el equipo no da más de sí o cualquier otra cosa pero llevamos unos partidos en los que, después de haber hecho tres cuartos decentes, en el último cuarto nos salimos del partido para perder una victoria que era nuestra. Ayer pasó lo mismo y después de haber llegado al final del partido ganando a todo un Gran Canaria nos diluimos para hacer un parcial vergonzoso de 24 a 9 para acabar el encuentro con un 83 a 75.

En el apartado individual nuestro mejor jugador fue Killeya – Jones, que aprovechando la ausencia de Hlinason, el cual se prevé que vuelva más pronto que tarde, acabó el encuentro con 17 puntos, 4 rebotes y 2 asistencias. Otro de los jugadores que hizo un muy buen partido fue el joven belga De Ridder, el cual acabó el encuentro con 10 puntos y 3 rebotes.

Por parte del equipo local el argentino Brussino capitaneó a los suyos con 19 puntos, 2 rebotes y 2 asistencias. Junto a él estuvieron Happ (14 puntos, 10 rebotes y 1 asistencia) y el francés Pelos (12 puntos, 7 rebotes y 2 asistencias). Cabe mencionar la actuación del ex MIB Lammers que acabó el encuentro con 10 puntos y 4 rebotes y dejando un mate de espaldas digno de ser la canasta del año. No me quiero olvidar de Bassas, el cual, aunque hizo 2 puntos y cogió 4 rebotes, el jugador nacional repartió 12 asistencias.

Esta derrota nos coloca con un récord de 5 victorias y 9 derrotas, pero gracias a las derrotas del Palencia frente al Zaragoza y del Granada frente al Unicaja, por suerte, seguimos a la misma distancia de los puestos de descenso que no conseguimos quitarnos de encima. Si queremos alejarnos del fantasma de la LEB toca ganar el viernes a las 19:00 en Miribilla a un Girona que después de arrancar la temporada como un tiro está de capa caída. Agur!

Parciales: 19 – 25, 23 – 18, 17 – 23, 24 – 9 = 83 – 75

Estadísticas individuales:

– Bilbao Basket: Killeya – Jones (17, 2, 4), De Ridder (10, 0, 3), Reyes (10, 0, 1), Smith (9, 1, 1), Tsalmpouris (7, 0, 2), Renfroe (6, 8, 6), Andersson (5, 1, 3), Pantzar (4, 2, 0), Rabaseda (4, 1, 1) y Kullamae (3, 3, 1).

– Gran Canaria: Brussino (19, 2, 2), Happ (14, 1, 10), Pelos (12, 2, 7), Lammers (10, 0, 4), Albicy (7, 4, 1), Salvó (7, 1, 3), Landesberg (5, 0, 2), Slaugther (4, 1, 3), Shurna (3, 1, 5) y Bassas (2, 4, 12).

(Imagen del Deia).