Un esperado reencuentro

Este viernes 17 de noviembre a las 21:00, en el primer día de la octava jornada de competición en LEB Oro, nos visita en Baloncesto Fuenlabrada, un viejo conocido de la afición Lucentina de épocas pasadas (y doradas). Lejos quedan ya en la memoria los enfrentamientos en ACB entre ambos clubes, los hermanamientos entre las peñas de ambos clubes y el poder disfrutar en la cancha de jugadores como el mítico Velimir Perasovic (que marcó una época en ambos equipos).
Ahora, once años después, los dos equipos se vuelven a ver las caras en la segunda máxima competición del baloncesto nacional, el HLA Alicante pretendiendo regresar a la máxima categoría después su caída a los infiernos, y el “Fuenla” al haber descendido tras 18 años consecutivos en la élite.
A priori, un aficionado podría pensar que ambos equipos se plantean como claros candidatos al play-off ésta temporada, pero el Pedro Ferrándiz reunirá a dos rivales que han comenzado de una forma dispar: El equipo Alicantino parece haber encontrado el buen camino, encadena tres victorias consecutivas y busca la cuarta en casa para ponerse 5-3, mientras que los fuenlabreños han comenzado la competición con un balance de 2-5 que, de seguro, no entraba en sus planes.
El buen momento del HLA Alicante
Parece que el equipo comienza a gozar de buena salud. Se intuyen vibraciones distintas a la temporada pasada y, pese a tratarse de un equipo muy joven que tiene apagones de irregularidad propios de una media de edad tan baja, parece que el talento de los jugadores se abre paso junto con la intensidad de juego que imprime desde el banquillo Antonio Pérez.
Un juego interior muy contundente que se combina con la lucidez exterior de jugadores como Gudmundsson o Brad Davison (MVP de las jornadas 5 y 7) pero que, por contra, aún tiene que trabajar su aspecto defensivo y rogar por el despertar definitivo de Tyler Harris.
Un rival con viejos conocidos
Enfrente nos encontramos con un Fuenlabrada que trae consigo algún veterano forjado en ACB como el base Tomás Bellas y un juego interior que promete dar guerra, con dos caras que nos resultan familiares en Alicante (Jorge Bilbao y Joey van Zegeren) y, el que se supone buque insignia del equipo, el ala-pívot Tanner McGrew.
Un bonito partido con sabor a comida casera y familiar el que tenemos por delante, pero en Alicante no nos olvidamos que queremos afianzarnos definitivamente en la zona alta de la clasificación. A disfrutar de buen baloncesto y ¡esperemos que podamos volver a encontrarnos algún día, de nuevo, juntos en ACB! (pero, desde el cariño, preferimos esperaros nosotros allí)
Imagen de redes sociales del HLA Alicante
