Borrón y cuenta nueva
La temporada del Fibwi Palma en la LEB Plata ha sido una montaña rusa de emociones, según lo expresado por Guillem Boscana, presidente del Bahía San Agustín. En una conferencia de prensa marcada por la sinceridad y la autocrítica, Boscana describió la campaña como un desafío constante, donde la permanencia se convirtió en un logro con sabor agridulce, dado que los objetivos marcados a principio de temporada eran bastante diferentes.
Mala temporada
“Ha sido una mala temporada con final feliz para el Fibwi Palma”, declaró Boscana, haciendo eco de la tensión que acompañó al equipo hasta el último instante. Aunque la salvación se celebró con júbilo el pasado sábado, el presidente admitió sentirse “decepcionado” por el rendimiento general del equipo a lo largo del año.
La irregularidad fue el sello distintivo de la temporada, con el equipo luchando por encontrar consistencia en su desempeño. Boscana identificó la falta de continuidad como un obstáculo significativo, destacando la salida temprana del director deportivo y las lesiones clave, como la del pívot francés Naoll Balfourier, como factores que impactaron el curso del equipo.
Un cambio de entrenador necesario
La destitución de Pau Tomàs antes del crucial derbi contra el Palmer Basket marcó un punto de inflexión en la temporada. Boscana describió la medida como “necesaria” para revitalizar al equipo y reconoció la dificultad personal de separarse de alguien que había sido parte integral del club durante casi dos décadas.
Mirando hacia el futuro, Boscana enfatizó la importancia de una planificación estratégica sólida, incluida la contratación de un nuevo director deportivo con autoridad para moldear el equipo y el cuerpo técnico. La renovación del principal patrocinador, aun y no estando firmada, parece un hecho dada la buena relación entre las dos instituciones, Boscana expresó optimismo sobre el respaldo financiero para la próxima temporada.
Sin embargo, los desafíos no se limitan al rendimiento del equipo. Boscana abordó la cuestión de la saturación en el pabellón Son Moix, señalando la necesidad de una solución a largo plazo para acomodar a múltiples equipos deportivos en una sola instalación.
En busca de la LEB Oro
En última instancia, el presidente del Fibwi Palma reafirmó su compromiso con el ascenso a la LEB Oro, alimentando la esperanza de regresar a la élite del baloncesto español en un futuro próximo.
La temporada puede haber terminado, pero las lecciones aprendidas y los desafíos por delante ofrecen un nuevo capítulo en la ya larga historia del Fibwi Palma, donde la determinación y la planificación estratégica serán clave para alcanzar nuevas alturas en el baloncesto español.
Fotografía cedida por Fibwi Palma.
