¡Cuarenta y cinco y subiendo…! El crecimiento de un club, de su equipo y de su cantera.

Cuarenta y cinco campañas del Club Baloncesto Zamora siendo la referencia baloncestística de la capital bañada por el Duero.

Cuando el baloncesto en España era un deporte emergente y Wayne Brabender, Nate Davis o Webb Williams eran la referencia del baloncesto nacional, en un deporte donde no se imaginaba a jugadores lanzando lejos del aro (aún faltaban años para instaurar en la NBA o en el baloncesto FIBA el lanzamiento triple, aunque ya existían precedentes y diez años antes de que naciera Stephen Curry…), en la capital zamorana surgía el proyecto de un club modesto dirigido por Gerardo Hernández de Luz, entrenador durante las 15 primeras temporadas.

Fue en la década de los 80, aprovechando el tirón de la plata olímpica de Los Ángeles, cuando todos los niños teníamos un balón que castigábamos propinándole patadas y empezamos a cambiar ese hábito buscando algo que emulara un tablero y un aro, entonces el baloncesto adquiría otro cariz. Aún recuerdo el pabellón municipal Ángel Nieto lleno “hasta la bandera” a finales de los 80,  viendo los partidos sentado en las escaleras entre gradas, a Ramón Ruíz lanzando sus tiros libres a tabla (con sorprendente efectividad), a chavales formándose en las canastas de la Ciudad Deportiva entre el frontón y el campo del antiguo Ramiro Ledesma, buscando una canasta donde imitar a sus nuevos ídolos, saltando las vallas de colegios, para usar sus pistas, porque era el único sitio donde se podía lanzar a canasta…

Desde esos años iniciales, grandes jugadores han pisado el parqué zamorano, Jordi Millera (que fichó por Baskonia), Salva Guardia (que hizo carrera en ACB), Juan Miñana, “Susi” Mezquita, Rubén López, Saulo Hernández, Jesús Vicente “Súper”, Alejandro Iglesias, Javier Cardito, Christopher Iza, Francisco Rodríguez, Ziga Samar (internacional en la Eslovenia de Luca Doncic…), Adam Somogyi  (recientemente fichado por el Morabanc Andorra de la ACB), cientos de jugadores… Sin olvidarnos del banquillo donde después de Gerardo llegarían otros entrenadores como David López, Boban Vukcevic o Bill McCamonn, hasta llegar a su actual entrenador, Saulo Hernández que esta temporada cumplirá su decimotercera campaña al frente del proyecto deportivo del club.

Mención especial para su historia y evolución hay que hacer a los últimos diez años en los que hemos visto crecer al Club Baloncesto Zamora poco a poco, de forma lenta, pero segura, ascendiendo desde la EBA a la categoría LEB Plata, creciendo en número de seguidores, tanto en las gradas como en sus redes sociales. Apoyados cada vez más por la sociedad zamorana e implicando a cientos de familias, con sus equipos de Juegos Escolares de la Escuela de Baloncesto, con equipos en multitud de colegios de la capital, con sus 10 equipos de cantera que competirán en competiciones autonómicas (cifra récord, alcanzada por primera vez) y por la creación de un equipo en Primera Nacional, que surtirá de efectivos al primer equipo cuando sea necesario (el curso pasado, se echó en falta un fondo de armario más amplio en el club que ayudara ante las lesiones de larga duración de Morgan Stilma y de Jacob Round).

Esta temporada 2023/2024 será la octava consecutiva en LEB Plata, consolidando el proyecto tras cinco años accediendo a la segunda fase en la lucha por el ascenso a LEB Oro y, llegando en las dos últimas ocasiones a disputar la penúltima eliminatoria que otorga derecho a competir en LEB Oro (eliminados por las canteras de Valencia Basket -en los últimos segundos del partido de vuelta- y del Joventud de Badalona -CB Prat-). El proyecto del club en la ciudad ha ido “calando” y contarán un año más con el apoyo de las instituciones, repitiendo patrocinador por tercer año consecutivo y continuando con la atractiva marca de “Zamora Enamora”.

A estas alturas del verano, donde el ritmo se ralentiza por el calor y buscamos momentos de actividad en la sombra, el club no ha parado de trabajar y ya podría sacar un quinteto a cualquier cancha con la renovación de Jacob Round (alero británico internacional en su tercera temporada en Zamora) y de Souley Traore (tercera temporada también en el club del pívot de Mali), a los que hay que añadir los fichajes de Kevin Buckingham (ala-pívot procedente del Iraurgi ISB tras dos temporadas en LEB Oro), Jonas Paukšte (pívot lituano de 2,24 m de altura procedente del Klaipedos Neptünas-Akvaservis de la Liga Nacional Lituana) y Josep Peris (base procedente de Talavera Basket).

Desde la capital que pisaba Viriato, el “terror de los romanos”, encaramos la próxima temporada con ilusión y nos permitimos soñar con acercarnos un poquito más a la LEB Oro, con permiso del resto de equipos involucrados en la LEB Plata y esperando que el futuro del club, siga con paso firme, creciendo en su proyecto y apoyado por su masa social.

Fuente foto: C.B. Zamora

Jose Manuel Crespo