octubre 16, 2024

En Oviedo también estamos: Verena Alonso

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Porque gracias a Dios vamos teniendo presencia en muchos de esos maravillosos lugares que se cuelan por la geografía española. También la tenemos en esa zona donde las “fabes” y la “sidriña” son de obligación pertinente en cualquier viaje. Esa zona donde el 21 de septiembre San Mateo deja de ser santo para convertirse en rey de todos los reyes, amigos míos, que por allí habitan.

Como los Verena Alonso, ovetense de esas que emborrachan de cariño. Esa que acaba una conversación con “un besín” que hace enternecer cualquier corazón.

Llego de las últimas, muy a principio de junio, pero no ha necesitado mucho tiempo para ganarse nuestros corazones. Pues como persona es de lo mejor que se puede encontrar uno este mundo.

Entró para hacerse cargo de las noticias del Alimerka Oviedo, siempre con una sonrisa por delante. Y semanas más tarde, aceptó el reto de colaborar en las redes, Instagram, de Basket Pasión. Y ahora, habiendo empezado de cero, está preparada para hacer un Máster donde enseñar a otros a hacer auténticas maravillas, de esas que siempre te preguntas: ¿en serio que hay gente capaz de hacer esas historias?

Pues sí, se llama Verena y es nuestra amiga.

Es tan correcta, tiene tanta mano izquierda, que donde cualquiera de nosotros sacaría un grito para decir “¿quién coño ha hecho esto?”, ella se expresa con cualquier susurro acompañado de la palabra amigo, cariño o amor.

Comprometida con un proyecto tan bonito como es Basket Pasión que es capaz de desatender otras cosas por tener el proyecto al día. Y cuando le surge algo y no puede estar por motivos urgentes ajenos a la web, sabemos que le duele y solo piensa en su regreso para que no la echemos de menos.

Y es que a Verena, aunque fuera tan solo un minuto, siempre se la echa de menos. Es más, estamos deseando escribir, tan solo por volverla a leer (me va a matar).

Y si leerla es de las sensaciones más bellas del mundo, escuchar ese timbre suave de voz donde el acento cambia las vocales para convertir la mayoría en “e” (nada que ver con el tema “ireniano), ya te hace temblar las piernas.

Lo he dicho y lo diré alto y claro: se llama Verena Alonso y es nuestra amiga.

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