Once Men in Black, always Men in Black

¡Esta sí que es la forma de acabar el último partido previo al parón de la Copa! Este domingo nos enfrentamos al Valencia Basket de Álex Mumbrú y gracias a los mejores 40 minutos sobre una cancha de baloncesto que la marea negra ha visto en lo que llevamos de temporada los chicos de Jaume Ponsarnau consiguieron llevarse el partido gracias a un marcador de 93 a 78.

Llevo desde principio de temporada diciendo que este equipo se siente muy agusto corriendo y jugando a la contra, gracias a robar balones entre líneas y ser fuerte en el rebote. Gracias a este juego, que la verdad salió bastante bien, los hombres de negro consiguieron irse hasta las 25 asistencias mientras que los de naranja se quedaron en 7 asistencias menos. Otro de los factores clave fue el ya mencionado rebote, el cual ganamos tanto en el apartado ofensivo (9 a 4) como en el defensivo (23 a 21).

El acierto fue otras de las piezas clave, aquí también salimos ganadores con un 59.4% (38 aciertos en 64 intentos) frente al 46.8% taronja (22 aciertos en 47 intentos). Si ponemos la lupa en esta estadística sí que el Valencia tuvo un mejor porcentaje en el acierto del triple pero solo 3.4 puntos por encima nuestro con un 47.4% y en el tiro libre, la estadística más escandalosa de esta jornada. Mientras que los nuestros anotaban 6 tiros en 15 intentos (40%), lo cual es una estadística nefasta los jugadores del dueño de la cadena de supermercados anotaron 25 tiros libres en 32 intentos, lo cual hace que acabaran el partido con un 78.1%. Esto es vergonzoso por dos partes, la primera es el ya mencionado acierto nuestro pero es que la otra es que el equipo de Mumbrú tirara más del doble de tiros libres que nosotros gracias a una actuación vergonzosa por parte del trío arbitral el cual salieron desde el minuto 1 con intenciones de hacer todo lo posible porque el equipo naranja ganara el partido, ya fuese por lo civil o lo criminal.

Cuarto a cuarto

El partido empezó con un intercambio de golpes entre los hombres de negro y los de naranja. El mayor acierto bilbaíno en el cómputo general de tiros (66.7% vs 46.2%), la superioridad en el rebote (6 vs 2), sobretodo en el defensivo, y los dos tapones hicieron que los locales se fueran por delante en el marcador con un cómodo 28 a 18 y con las sensaciones de que se podía conseguir la novena victoria.

En el segundo cuarto se vino la calamidad. Gracias al trío arbitral, el cual iba de gris para que no diese demasiado el cante de que estaban a favor del equipo valenciano, estos consiguieron sacarnos 11 faltas escandalosas mientras que a favor nuestro solo pitaran 4. De esas 4 una de ellas tendría que haber sido castigada con la antideportividad, estoy hablando del mandoble que le metió Justin Anderson, ex jugador del Breogán, a Melwin Pantzar, el cual toca balón de casualidad porque su intención no era jugar este, si no cortar un contraataque dejandole las huellas marcadas en el antebrazo. Los hombres de negro superion aprovechar este viento en contra y tirandose al barro firmaron un parcial de 14 a 15 para dejar el marcador en el descanso en un “cómodo” 42 a 33.

Al volver del vestuario el trío arbitral se relajó un poco y pasó de robarnos escandalosamente a hacerlo poco a poco, con faltas tontas y decisiones arbitrales no tan escandalosas. En este tercer cuarto la anotación fue bastante superior en los dos lados de la cancha pasando los dos equipos de un 70% de acierto con un 75% (12 de 16) para el equipo bilbaíno y un 72.7% (8 de 11) para los taronja. Este gran acierto y la igualdad en el rebote hicieron que el parcial fuese de 28 a 25 a favor de los locales, el cual dejaba el marcador en 70 a 58 a favor del equipo bilbotar.

Resistencia bilbaína

En el último cuarto los chicos de Jaume Ponsarnau consiguió resistir los golpes del Valencia y gracias a que se fueron viniendo arriba minuto a minuto consiguieron cerrar el partido en un 93 a 72 gracias a un último parcial de 23 a 20. ¿Culpable de esto? El ya mencionado acierto (77.6% frente al 50%) y los rebotes ya que mientras que nosotros cogíamos 9 de ellos (6 defensivos y el resto ofensivos) los rivales cogieron tres veces menos y todos ellos defensivos. Por otro lado fueron capaces de no perder ningún balón mientras que nosotros perdíamos 2.

El protagonismo individual del Bilbao Basket se repartió entre cuatro jugadores, siendo estos Sacha Killeya – Jones (18 puntos y 3 rebotes), Kirstian Kullamae (14 puntos, 3 asistencias y 1 rebote), Adam Smith (14 puntos, 3 asistencias y 1 rebote) y Melwin Pantzar (13 puntos, 4 asistencias y 6 rebotes). También quiero remarcar la actuación del chaval belga el cual tiró de su garra característica y nos dió 8 puntos, 1 asistencia y 7 rebotes.

Por parte del Valencia Basket Semi Ojoleye fue el protagonista indiscutible con 17 puntos y 4 rebotes. Junto a él estuvo el jugador que mencioné en la previa Chris Jones, el cual poco a poco fue entrando en el partido y para fortuna de los locales se quedó en 15 puntos, 5 asistencias y 1 rebote. El último protagonista fue Justin Anderson, tanto en números con 12 puntos, 1 asistencia y 3 rebotes como en presencia porque desde el minuto 1 se le vió muy subidito de tono, menos mal que nuestro Melwin Pantzar le bajó los humos más de una vez.

Situación al parón

Esta victoria nos deja en un récord de 9 victorias y 13 derrotas, gracias a ello seguimos manteniendo la décimo segunda posición compartiendo récord con el Zaragoza pero gracias a que tiene el average particular ganado están por delante nuestro, en la décimo primera posición. Después de la derrota de Breogán, Obradoiro y Granada hemos pasado de tener un colchón de dos victorias sobre el descenso a estar a tres, así que un poco de oxígeno de más nunca viene mal.

Por lo demás no tengo nada que decir, estaré algo inactivo este parón de copa pero espero traeros contenido diferente para haceros más ameno estas semanas que vamos a estar sin ver a nuestros hombres de negro, así que estad atentes a las redes sociales y disfrutad de la Copa o de estas minivacaciones, agur!

Parciales: 28 – 18, 14 – 15, 28 – 25 y 23 – 20.

Estadísticas individuales:

– Bilbao Basket: Killeya – Jones (18, 0, 3), Kullamae (14, 3, 1), Smith (14, 3, 1), Pantzar (13, 4, 6), De Ridder (8, 1, 7), Hornsby (7, 2, 1), Hlinason (6, 1, 3), Rabaseda (5, 3, 3), Renfroe (5, 6, 1), Andersson (3, 1, 2) y Reyes (0, 0, 2).

– Valencia Basket: Ojeleye (17, 0, 4), Jones (15, 5, 1), Anderson (12, 1, 3), Inglis (9, 4, 5), Robertson (7, 0, 1), Jovic (6, 3, 1), Claver (4, 0, 1), Pangos (3, 2, 3), Pradilla (3, 2, 2), Reuvers (2, 0, 1) y Puerto (0, 0, 1).

Imagen del Bilbao Basket.