Son Moix, al rojo vivo
El Fibwi Palma Bàsquet está a punto de vivir un emocionante maratón de partidos en casa que puede marcar un antes y un después en su temporada. Bajo la dirección de Pablo Cano, el equipo mallorquín se enfrenta a una serie de desafíos consecutivos en el Palau D´Esports de Son Moix, un lugar que esperan convertir en un auténtico fortín. En un deporte tan exigente como el baloncesto, la importancia de jugar en casa no puede subestimarse, y el Fibwi Palma tiene ante sí la oportunidad perfecta para consolidarse como un equipo temible en su propia cancha.
Primero, el derbi
El primer reto de este maratón se vivirá el domingo 27 de octubre, cuando el Fibwi Palma Bàsquet reciba al Class Bàsquet Sant Antoni en lo que será el primer derbi interislas de la temporada regular. Este partido no solo será especial por la rivalidad entre islas, sino porque el Class Bàsquet Sant Antoni llega a Son Moix como líder del grupo este de la Segunda FEB, lo que le añade un toque de emoción y desafío extra a la contienda. Los encuentros entre equipos vecinos siempre tienen un toque especial, y este duelo promete ser un espectáculo tanto dentro como fuera de la cancha. El Fibwi Palma buscará aprovechar el aliento de su afición para conseguir una victoria que no solo sería crucial para seguir sumando, sino que también reafirmaría su ambición de luchar por los primeros puestos.
Problemas en Gandía
Pero este encuentro es solo el inicio de una intensa secuencia de partidos. Apenas una semana después, el 3 de noviembre, el Proinbeni UPB Gandía será el siguiente rival en visitar Son Moix. Curiosamente, este partido debía jugarse en tierras valencianas, pero un contratiempo con las instalaciones del Pabellón Municipal de Gandía obligó a cambiar los planes. Gracias a la buena disposición de ambos clubes, el Fibwi Palma Bàsquet jugará este partido como local, una oportunidad inesperada pero que puede ser aprovechada para seguir consolidando el trabajo del equipo en su propia cancha. Jugar dos partidos consecutivos en casa es un verdadero lujo para el equipo mallorquín, y la plantilla está decidida a no desaprovecharlo.
El regreso de David Font
El 10 de noviembre, los aficionados de Son Moix vivirán un reencuentro muy especial. Ese día, el Fibwi Palma se enfrentará al Sant Feliuenc, pero todas las miradas estarán puestas en un hombre que dejó una huella imborrable en la afición mallorquina: David Font. El regreso de Font, uno de los jugadores más queridos en la historia reciente del club, será sin duda un momento cargado de emotividad. Aunque ahora milita en el equipo catalán, su vuelta a la isla será un recordatorio del cariño que siempre ha tenido por el club y su afición. Enfrentarse a él como rival será extraño, pero al mismo tiempo, motivará al Fibwi Palma a dar lo mejor de sí para lograr la victoria. Sin duda, será una tarde especial para todos los presentes en Son Moix.
El maratón de partidos en casa se cerrará el 17 de noviembre, cuando el Nadunet Refitel Bàsquet Lliria visite Son Moix. Este partido también tendrá un toque emotivo, ya que jugadores como Marc García y Alejandro Rivas volverán a la isla, aunque esta vez como visitantes. Para ellos, regresar a un escenario donde vivieron grandes momentos será un reto tanto personal como deportivo. Para el Fibwi Palma, este partido será la culminación de una racha de cuatro encuentros consecutivos en casa, una oportunidad inigualable para sumar victorias y hacerse fuerte en su feudo. El objetivo es claro: convertir el Palau D’Esports de Son Moix en un lugar donde los rivales no quieran jugar, un verdadero fortín que impulse al equipo hacia los objetivos más altos de la temporada.
Una gran oportunidad
Para el Fibwi Palma Bàsquet, estos partidos representan mucho más que simples encuentros. Son oportunidades para demostrar la capacidad del equipo, para que los jugadores se conecten aún más con su afición y para que el trabajo duro de cada entrenamiento se vea reflejado en la cancha. El Palau D´Esports de Son Moix se convertirá en el escenario de grandes batallas, de momentos de tensión y alegría, y de una comunión entre equipo y afición que puede ser la clave para una temporada exitosa. Los aficionados saben que su apoyo será crucial en este tramo y están preparados para llenar las gradas, crear un ambiente único y alentar al equipo en cada posesión, en cada tiro, en cada defensa.
En definitiva, el Fibwi Palma Bàsquet se enfrenta a un desafío apasionante. Cuatro partidos en casa que pueden definir su temporada y en los que la afición jugará un papel fundamental. El baloncesto es un deporte de emociones, y no hay mayor emoción que la que se vive en casa, rodeado de los tuyos, luchando por cada victoria. ¡Que comience el maratón!
Fotografía cedida por Fibwi Palma.
