Cáceres: reacción tardía

Cáceres cae en tierras orensanas por culpa de un horrible cuarto (otra vez), esta vez el primero (23-9), con Baloncesto Orense en el Pazo Dos Deportes Paco Paz con un ambiente festivo al son de charanga por 76-70.

Que esta no es la dinámica que debe seguir el Cáceres Patrimonio de la Humanidad, eso es “de cajón”. Se viene viendo en todos los partidos como un equipo nuevo como el Cáceres se desconecta literalmente del partido en un cuarto. Y esas pájaras lastran el resto del partido.

Si a todo ello le unes la total imprecisión en el rebote defensivo donde 14 se los lleva Orense (es decir, posibilidad de 28 puntos) el partido se convierte en un caos total, en una desgana que hasta se reflejó en el juego de Dani Rodríguez, más fuera que dentro del partido.

Ir a contracorriente todo el partido es complicado, porque a partir de ahí o te sale todo bien o no ganas ni a infantiles. Y eso nos ha pasado contra Orense. Si el primer cuarto es de 23-9, toca remar con fuerza y concienciados de la posibilidad de remontar.

Además es que se repite la situación de otros partidos con parciales de 8 o 9 puntos en los 10 minutos. Por lo que empieza a ser un problema no solo puntual.

Y al final, quizás nos marcó las faltas personales de nuestros dos pívots y que “el Grande” Cepukaitis no haya tenido aportación especial en este encuentro.

Pero no todo es negativo en Cáceres. Hoy debutaba un atrevido “verso libre” Lysander Bracey y enhorabuena, porque con apenas 48 horas en tierras cacereñas ya hay que tener valor para tener la responsabilidad de saltar a pista.

Vemos a un Albert Lafuente, en crecimiento y muy acertado en tareas ofensiva. Se convertía en el mejor jugador la jornada pasada y contra Orense acaba con 15 puntos anotados y 15 en valoración.

Kevin Bercy es un jugador que siempre está ahí pero quizás pueda coger el liderazgo de este equipo un poco descabezado. Hoy ha superado su media anotadora y se ha tenido que jugar los últimos minutos, a falta de pívots, en una posición que no es la suya.

A Simas Jarumbauskas se le ve con la cabeza más centrada y muy contributivo en el juego sobre todo de ataque. Aunque se espera un poquito más del jugador.

Pero si podemos hablar de algo todavía más positivo, es del posible despertar de la bestia. Kaspars Vecvagars renace cual ave fénix para convertirse en el mejor del equipo con 18 puntos anotados, 3 de 3 en triples. Y esperemos que siga el progreso, pues desde Basket Pasión (sección Cáceres) siempre hemos apostado por el jugador letón.

En la situación que estaba el partido, ¿qué hubiera pasado si éste dura dos minutos?

No se sabe, pero hubiera sido divertido haberlo visto.

A Roberto Blanco le queda mucho trabajo por delante, con mucha capacidad de mejoría. Pues diferencias de más de 20 puntos es echar el partido por tierra. Y aunque ningún equipo es una perita en dulce cierto es que Orense podía haber sido de los más asequibles, sobre todo siendo el primero en un mes de diciembre complicado pues se nos acercan Palencia y Burgos.

Como nota negativa, por no decir vomitiva, yo, Javier Romo, pensaba que el deporte de la canasta era de caballeros y la mayoría lo son, pero curioso que me vaya uno en un gesto totalmente de desprecio al equipo contrario.

Estimado Paco del Águila, corría el minuto 7:18 para terminar el tercer cuarto, con el marcador 44-31 cuando tú consigues un “triplazo”. Admito celebraciones de rabia, de fuerza, de coraje… Pero que te pongas a bailar… Y es que las cámaras te grabaron bailando hacia el banquillo.

¿Y tú fuiste jugador del Cáceres? Pues, chaval, enhorabuena por la victoria, pero mi respeto no te lo has ganado.

Mes de diciembre, ¡sí se puede!

Ficha técnica

Orense:

Manjgafic 14, Willet 20, Cera 0, Chapero 0, Pilepic 9, Williams 0, Del Águila 5, Nogues 1, Ventura 5, Aboubacar 7, Peciukevicius 15

Cáceres:

Lafuente 15, Bercy 12, Isiani 4, Cepukaitis 0, Jarumbauskas 11, Olaizola 2, Santos 0, Sánchez 0, Vecvagars 18, Rodríguez 4, Bracey 2, Toledo 2

Rueda de prensa de Roberto Blanco: