Competir o niños de cristal

Lo de siempre. Es el tema de siempre en el que algunos estamos mal vistos por querer intentar educar a los niños para que vean la realidad de la vida.

Y lo volvemos a ver estos días en el Mundial Sub 19, y ahora que lo “anglicamos” todo llamado U19 supongo que U de “under”. Mundial que, aunque parezca mentira, se juega por fin en una sola sede, Hungría.

Nivel de baloncesto, óptimo… y no tan óptimo.

El día 28 se enfrentaba nuestra selección, la Selección Española, en octavos de final, a Líbano. De la que entendíamos antes del partido que no sería una selección fuerte como así paso.

El partido terminó con una derrota, quizás frustrante, para el país árabe, pues el marcador final marcaba un claro 102-20.

Y es aquí cuando saltan las alarmas. Y no, no es una errata del corrector. Ese fue el resultado final.

Hablemos del problema que se genera. Ese de sobreprotección de héroes caseros que cuando se meten en una cancha de baloncesto pierden esos pseudo poderes quedando desprotegidos ante la realidad de la vida, o en este caso de la competición.

Desde que se ha destrozado el baloncesto en España, hay algunas categorías donde en un partido, si la victoria de uno de los equipos sobrepasa una diferencia ya marcada por la federación (variable según qué categoría), el marcador se para pero el juego sigue.

¿Lógico?

Algunos, sobre todo padres: claro, los niños vienen a divertirse y eso le puede dejar marcado.

Otros, entre ellos yo: No, a los niños hay que educarles en la competición, y tienen que aprender a ganar y sobre todo a perder. A saber en qué escalafón de la competición se encuentran, sin mentiras, sin ambages, sin sobreprotección parental.

Porque de lo contrario, estaremos educando niños de cristal. Y eso no será bueno para el futuro del niño, ya no en el deporte sino en la vida real.

Respecto al partido de España vs Líbano, ¿qué tenía que haber hecho la selección española? ¿Bajar la intensidad?

Creo que no. Hacer eso sí sería lo más humillante para los contrarios. Un equipo, por respeto al rival, debe jugar como sabe… SIEMPRE.

Exhibir un nivel en el deporte no es humillar. Humillar es despreciar al rival bajando el nivel. El respeto está en las acciones, en el principio de partido y en el final del mismo. Pero sobretodo en el juego.

Padres, piensen ustedes si queremos competir o niños de cristal.