Más cerca el primer partido de Primera

La Final Four de LEB Oro se disputará este fin de semana y decidirá el segundo ascenso a ACB, acompañando al campeón de la categoría, el Leyma Coruña. Los candidatos son Movistar Estudiantes (anfitrión de la Final Four), Longevida San Pablo Burgos, ICG Força Lleida y Grupo Ureta Tizona Burgos. Los dos equipos que subirán de categoría sustituirán a Monbus Obradorio y a Zunder Palencia entre los grandes. El resto se unirán a Odilo FC Cartagena CB, C.B. Starlabs Morón y Zamora Enamora. Faltan por decidir muchas cosas, no sólo los integrantes que formarán los dieciocho participantes de la segunda categoría nacional y primera del baloncesto federativo español. De este póker de equipos que jugarán la Final Four, tres continuarán un año más en busca del ascenso. Si tuviéramos que elegir el protagonista del ascenso, desde Zamora seleccionaríamos al equipo leridano, con lo que subiría el conjunto que supondría uno de los desplazamientos más largos del año, permaneciendo los tres más cómodos, dos plantillas de Burgos y otro de Madrid, que unidas a Oviedo (Alimerka OCB), Palencia (Zunder), Fuenlabrada (Baloncesto Fuenlabrada) o Valladolid (UEMC Real Valladolid Baloncesto), formarían un grupo muy cercano a la capital del Duero, pero en esta historia no tenemos ni voz ni voto, así que veremos con atención la fiesta del baloncesto en la Final Four de la LEB Oro del fin de semana y nos centraremos en lo que podemos hacer y disfrutar para la próxima temporada.
Campaña de abonados.
Como hemos comentado en anteriores artículos, la campaña de abonados del CB Zamora “va como un tiro”, en pocos días se confirmó la pre-reserva de más de la mitad del aforo que permite el Pabellón Municipal Ángel Nieto, con menos de dos mil asientos disponibles en total. La novedad de esta nueva campaña es que el club va a dar un salto de calidad en la venta y asignación de abonos y entradas acorde con la nueva categoría. Hasta ahora el club se ha ido adaptando a los tiempos y a cada situación. Antes de la pandemia del COVID 19 y disputando ya la LEB Plata, la afición se distribuía por la zona de tribuna, llegando en el mejor de los casos a la media entrada, la zona de preferencia se reservaba para una docena de miembros de la prensa. Con la llegada del COVID 19 y de sus restricciones, se decidió abrir ambos lados del vetusto pabellón zamorano para contar con más asientos para cumplir con la distribución de las distancias establecidas por las administraciones sanitarias para hacer frente a los contagios, además de las medidas adicionales como llevar mascarillas. Poco a poco, el miedo o la situación “covidiana” se fue relajando, pero la apertura de ambos lados de las gradas se conservó por parte de los dirigentes del club, lo que fue un acierto con la creciente afición e interés del público zamorano por el baloncesto masculino. Las entradas en tribuna tenían un precio ligeramente superior a la preferencia, pero en otra buena decisión del club, hace un par de temporadas se decidió unificar los precios de todos los asientos del Pabellón Municipal Ángel Nieto y que cada aficionado decidiera dónde disfrutar los partidos, en tribuna con una butaca “más cómoda” o en preferencia con la parte más bulliciosa donde se ubica la peña de los “Diablos Blanquiazules”.
Con el playoff en la temporada 2.021/2.022 contra Hestia Menorca y luego con Valencia Basket (con la recordada pérdida de Bobby Harris a escasos segundos del final), la grada se nutrió de espectadores rozando más del 80% del aforo, al año siguiente en la 2.022/2.023 contra Maderas Sorlí Benicarló y contra C.B. Prat (lástima de partido de ida) se volvió a repetir la historia acrecentando aún más el interés del público zamorano y, como colofón esta última temporada, la 2.023/2.024, temporada para la historia, se llenó el pabellón hasta en tres ocasiones, la Copa LEB Plata y las dos finales contra Odilo FC Cartagena CB y contra Bueno Arenas Albacete Basket en la búsqueda del ascenso de categoría. La nueva temporada en la estrenada Primera FEB que sustituye a la LEB Oro como segunda categoría nacional, traerá ilustres integrantes del baloncesto nacional español, a los ya mencionados anteriormente, hay que añadir a Real Betis Baloncesto, HLA Alicante (antiguo contrincante en la primera final de Copa LEB Plata de la historia del CB Zamora), Guuk Gipuzkoa Basket y Hestia Menorca. Con muchos de ellos CB Zamora ya tiene enfrentamientos anteriores, pero otros serán rivales inéditos en las jornadas oficiales de enfrentamientos de la historia del club.
El cartel que se anuncia a partir de octubre de 2.024 va a ser espectacular, con equipos con historia reciente en la ACB y duelos regionales y otros muy cercanos que permitirán el desplazamiento en masa de sus aficiones. La acogida de la campaña de abonados se lanzó aprovechando el impulso del ascenso, intentando recoger el auge baloncestístico de la ciudad antes de que se enfriara paradójicamente por el caluroso y lánguido periodo estival. Sin conocer los precios finales de los abonos, los primeros días se llegó al 62% total del aforo del pabellón zamorano y en esta última semana han confirmado desde el club el 70% del aforo con la pre-reserva completada. En el mes de junio se espera que, con un ligero goteo, se aproxime lo máximo posible al 75-80%, asegurando tres cuartas partes de aforo ocupado en todos los partidos de Primera FEB.
Apoyo institucional.
Una de las patas del banco fundamental para la próxima campaña, además del entramado social vinculado al club, los profesionales del CB Zamora y el cuerpo técnico y la plantilla, será el apoyo de las empresas locales y de las instituciones de Zamora. Aunque al hacer un simple análisis del paralelismo de diversas reacciones al ascenso del equipo de fútbol de la capital, es inevitable sentir cierto agravio comparativo.
El CB Zamora, ascendió de la tercera categoría nacional (LEB Plata) a la segunda (LEB Oro) hace escasas semanas. En una de las finales por el ascenso, el club organizó un viaje para poder acercar a sus aficionados a Cartagena (Murcia), pero no se llegó al mínimo de personas necesarias para poder disponer de un autobús. Por parte de las instituciones el comentario del Ayuntamiento desde el principio fue de no fletar ningún medio de transporte, porque no se ha hecho nunca por su parte y no querían crear un precedente que discriminara a un deporte sobre otro, a pesar de lo excepcional de la situación. Finalmente, los aficionados que acudieron a Cartagena (Murcia) y Albacete
(en la segunda final por el ascenso) lo hicieron por sus propios medios sin ningún tipo de ayuda. Los aficionados del CB Zamora entendieron la situación y la aceptaron, viendo con envidia como Cartagena disponía de cuatro autobuses en la final de la Copa LEB Plata, cortesía de su ayuntamiento y de su patrocinador principal.
Pero hace quince días, el equipo de fútbol de la ciudad, que jugando en la cuarta categoría nacional (Segunda RFEF), buscaba el ascenso a la tercera categoría (Primera RFEF) en San Sebastián de los Reyes (Madrid), dispuso de un par de autobuses que proporcionó la Diputación de Zamora y Caja Rural, con el consabido agravio comparativo citado anteriormente. Es cierto que el fútbol es el deporte rey en el panorama nacional e internacional y que “mueve masas”, pero la gesta del baloncesto y la relevancia de la competición a la que han accedido esta temporada, colocando el nombre de Zamora en el panorama nacional e incluso internacional, por la importancia del baloncesto que se disputa en esta categoría, es un escaparate excepcional para la marca “Zamora” y aunque el fútbol, como decíamos, mueve masas, el baloncesto en Zamora ha demostrado que merece la suficiente atención como para equipararse a otros deportes zamoranos. Por otro lado, felicitamos desde aquí al Zamora CF por su ascenso, del que nos alegramos igual que el mundo del fútbol zamorano se alegró del ascenso del baloncesto, pero “lo cortés no quita lo valiente” y no podemos dejar de sentirnos agraviados por la atención institucional y empresarial alcanzada.
Si el CB Zamora quiere tener continuidad en la nueva categoría tendrá que contar con el máximo apoyo local, no sólo institucional, sino de empresas y negocios privados que podrán añadirse a una imagen que, si se explota correctamente, les dará la relevancia necesaria para no arrepentirse de formar parte del proyecto del CBZ 2.024/2.025. Esperemos que las instituciones apoyen al baloncesto zamorano como se merece, aprovechando el creciente interés del aficionado local que se prepara para vivir una etapa única del CB Zamora en su larga trayectoria.
Imagen de las redes del club.
