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Sentado tranquilamente tras la comida, medio dormido, medio despierto, en el cómodo sofá del salón, cogí mi móvil y empecé a “trastear” en las redes de los equipos de Primera FEB, escudriñando poco a poco cada incorporación o renovación de los clubes que formarán parte de la ya extinta LEB Oro y que con su nueva nomenclatura: Primera FEB, supone la máxima categoría del baloncesto federativo nacional, sólo por debajo de la Liga Endesa, la ACB.

Al analizar el trasiego de fichajes veraniegos, la mayoría de clubes de Primera FEB estaban ya reforzando el grueso del equipo, de hecho, como recientemente decía algún aficionado más sabio que yo en algún grupo de whatsapp “los grandes cambiándose cromos” y es que CB Zamora no está en esa liga, la solvencia económica de equipos como Zunder Palencia, Monbus Obradoiro, o Real Valladolid Baloncesto y otros de gran tradición en la categoría como Oviedo OCB o Amics Castelló ya tienen más de la mitad de la plantilla configurada.

Desde la capital castellanoleonesa se anunciaron tres renovaciones a finales de junio y la cuarta hace unos días, ahora hemos entrado en estado de hibernación, coincidiendo con la contraposición del estío veraniego y el calor, pero ¿tiene sentido encender las alarmas a estas alturas de julio?

Grueso de incorporaciones

Para saber cómo ha llegado hasta aquí el club zamorano, sólo hace falta recordar la pasada campaña, una de las más exitosas de su historia, enumerar cada fichaje del club y cuándo se consiguió cada pieza del puzle.

A estas alturas del verano, CB Zamora tenía cerrados a Jacob Round, Souleymane Pinda Traoré y a Kevin Buckingham. Las similitudes son grandes al comparar ambos meses de julio, este año en la misma fecha están confirmados Jahvaughn Powell, Jacob Round y Kevin Buckingham, prácticamente los mismos protagonistas con un solo “cambio de cromos” de Souleymane Pinda Traoré por Jahvaughn Powell. La pasada campaña en los siguientes treinta días sólo se confirmaron dos nuevos jugadores, el 26 de julio Jonas Paukštė y el 29 de julio Josep Peris. Esta temporada se ha confirmado a Jonas Paukštė hace escasos días, por lo que el paralelismo entre ambas temporadas es evidente. El resto de los fichajes fueron “cayendo a cuenta gotas”, el ocho de agosto Jahvaughn Powell, el 22 Daniil Shelist (recientemente fichado por Peñas Huesca para jugar con el equipo oscense en Segunda FEB), y el 30 de agosto Carlos Sáenz-Díez que alternó el Primera Nacional con el LEB Plata. Luego en septiembre Toni Naspler y Jon Larrea. Y con la temporada en curso, llegaron Michael Drame, Erikas Kaliničenko y Ondrej Husták, configurando al equipo campeón de la Copa LEB Plata y que finalmente consiguió el ascenso a LEB Oro.

El proceso de maduración

Fichar como si de una cosecha se tratase, el producto que un agricultor trabaja y mima, lo planta y supervisa, observa cómo crece, lo riega y proporciona los cuidados necesarios para cosecharlo en el momento justo de maduración, si lo hace pronto el producto es inmaduro y estará verde, si deja pasar la oportunidad ideal se madurará demasiado y no será un producto óptimo. Así se plantean los fichajes en el CB Zamora, durante las últimas temporadas no entraban a “fichar a saco” en cuanto acababan la temporada, maduraban las decisiones y buscaban su “tempo”, el momento ideal para poder captar a jóvenes de gran proyección y que encajaran correctamente en el proyecto zamorano, donde les asegurarían minutos de calidad en una gran liga, con crecimiento constante y con visibilidad, casos como el de Toni Naspler que en Manresa no iba a poder jugar lo suficiente recaló en un LEB Plata jugando partidos y promediando minutos o como el pívot checo Ondrej Husták del mismo equipo manresano. Ese es el valor de los equipos de Saulo Hernández, jóvenes con gran proyección, internacionales en categorías superiores, que ven como al llegar a las máximas categorías no tienen el sitio que merecen, porque los equipos no pueden esperar a que un jugador crezca, necesitan resultados inmediatos, y ese equilibrio es lo que ha conseguido el técnico zamorano y su club estos años, dar minutos a jóvenes promesas que no tenían suficiente protagonismo en sus clubes de origen y a la vez, obtener el suficiente rendimiento para sacar algo positivo en su equipo.

Lento ma non troppo

Esa expresión italiana que significa “lento, pero no demasiado” parece aplicable a las pretemporadas zamoranas, a mediados de este mes de julio cuatro renovaciones han sido confirmadas, el escolta británico Jacob Round, el base jamaicano Jahvaughn Powell, el ala-pívot estadounidense Kevin Buckigham y el pívot lituano Jonas Paukštė. Tras la llegada confirmada del lituano Jonas, algún medio local afirmaba que el base de Manresa Toni Naspler sería el siguiente, pero días después no existen noticias de nuevos fichajes, la llegada del base catalán sería la guinda del pastel de las renovaciones, pero parece que se puede torcer su regreso o se hará de rogar.

Seguiremos expectantes desde las piscinas y lugares de recreo estival las noticias de llegadas al club, con el deseo de que los jugadores que lleguen cumplan con las expectativas del nuevo proyecto que debe buscar cumplir con la categoría y conseguir la continuidad en esta Primera FEB, hasta ahora, tras varios años seguidos, el CB Zamora se ha ganado el permitir no dudar de su buen trabajo.

Imágenes de las redes sociales del CB Zamora

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