¡Vaya partido!

El HLA Alicante ha ganado 86 a 64 al Amics de Castelló en el último partido de la primera vuelta de la liga y se afianza en la octava plaza, dentro de los puestos de play-off. Ojalá poder dejar de escribir la crónica en esta frase y que pareciese que el abultado resultado de +22 ha sido un gran triunfo del equipo alicantino, que está muy en forma. Pero no es así.

El partido comenzó con cierta normalidad pero se acabó convirtiendo en lo que se suele llamar “solteros contra casados” donde habían más balones perdidos y errores no forzados, que jugadas que acaban bien (22 balones llegó a perder el Lucentum y 20 el Amics de Castellón). Esto sucedió en ambos equipos pero, por suerte para nosotros, el Lucentum supo nadar algo mejor en esas aguas turbulentas y conseguir una victoria que, aunque buena y necesaria para nuestro ánimo, deja un cierto regusto negativo. Hay que ponerse las pilas.

La clave: el rebote

Si hubo una estadística en la que se vio una amplia diferencia entre ambos equipos y que, probablemente, fue el principal factor para que el Lucentum lograse esa victoria (abultada) final fue el rebote. 36 rebotes del equipo Alicantino, por 18 del Castellón. El doble. La estadística se nota aún más si miramos el rebote ofensivo, 16 rebotes ofensivos capturaron los locales por tan sólo cinco los visitantes.

Castellón venía con un nuevo fichaje de gran envergadura para el puesto de cinco, Viny Okouo, precisamente con la principal misión de mejorar ese aspecto del que tanto están adoleciendo, y algo ha hecho, ya que ha sido el máximo reboteador de su equipo, pero aún queda mucho trabajo por hacer defensivamente para que no acaben perdiendo los partidos ahí.

En cuanto a la anotación, sólo dos jugadores de Castellón superaron los 10 puntos: Manchón anotó 10 y Hermanson 13 (de hecho, el americano fue el único jugador de su equipo que anotó triples, y no muchos, tres) Con todos estos ingredientes sumados al que antes hemos mencionado de los balones perdidos, ya se pueden ir haciendo una mejor idea del tipo de partido que se vió. 

Victoria en un mal partido. Borrón y cuenta nueva.

El primer cuarto empezó trepidante y con energía. Castellón comenzaba poniendo arriba 2-7 y ambos equipos se mantuvieron intercambiando canastas hasta que, en el ecuador del cuarto, la línea exterior del cuadro alicantino aumentó su nivel de acierto y se puso ligeramente al frente, conservando una relativa igualdad en el marcador al final del cuarto (22-20)

En el segundo cuarto ya se vió lo que iba a ser la dinámica principal del partido: Castellón no lograba cerrar el rebote y eso marcaba la diferencia en las segundas oportunidades para los alicantinos. El HLA Alicante se marchaba en el marcador y llegaba al descanso con 47-31 a su favor.

En la reanudación comenzaron las pérdidas de balones constantes entre ambos equipos, con la diferencia que los alicantinos anotaban de vez en cuando. Parcial favorable de 14-0 para los locales y un Castellón que no anotaba un solo punto hasta la mitad del cuarto. Máxima de partido de +30 y eso no había quien lo remontara ya.

El último cuarto fue más de lo mismo, jugadas de chiste, pérdidas inverosímiles y constantes, dar minutos a los que menos juegan y acabar ganando 86-64. A mejorar, olvidarnos del mal juego, pensar que hemos ganado, y a por el siguiente. En una semana visitamos Valladolid, que los tenemos justo por encima. Habrá que ponerse el cinturón de trabajo.

Ficha técnica:

HLA ALICANTE: Davison(19), Balint(11), Rodriguez(10), Kostadinov(9), Barro(13) -cinco inicial— Serrano(4), Harris(4), Gudmundsson(4), Bercy(4), Gatell(8), Arcones (0) y Hook (0).

AMICS CASTELLÓ: Franch(5), Martínez(2), Dominguez(5), Stutz(9), Okouo(2)–cinco inicial– Bressan(9), Faner(7), Manchón(10), Hermanson(13), Aboubacar(2),  López (0) y Roig (0)

Imagen de redes sociales del HLA Alicante.