Aruncitanos, ¿Cuál es vuestro trabajo?
1 | 2 | 3 | 4 | T | |
---|---|---|---|---|---|
MOR | 22 | 15 | 20 | 31 | 88 |
UDEA | 20 | 15 | 23 | 18 | 71 |
CB StarLabs Morón
88
1 | 2 | 3 | 4 | T | |
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MOR | 22 | 15 | 20 | 31 | 88 |
UDEA | 20 | 15 | 23 | 18 | 71 |
71
Damex Udea Algeciras
CB StarLabs Morón
88
-
71
Damex Udea Algeciras
-
Q1
22- 20
-
Q2
15- 15
-
Q3
20- 23
-
Q4
31- 18
Mil gargantas, mil voces, mil gritos y una ilusión, no hay otra manera de describir el ambiente del Alameda, bueno si lo hay, infierno, caldera, olla a presión o si nos queremos poner cinéfilos y hacer referencia al título de la crónica, un ejército de espartanos capaces de dejarse la piel para llevar en volandas en su equipo, comandado por su particular Leónidas; un José Alberto Jiménez que ejerció de general d las huestes sevillanas. El resultado de esta comunión fue que el derbi frente a UDEA Algeciras se quedó en casa con marcador de 88-71.
Un inicio brutal
El CB Morón empezó el partido como el día, es decir, calentito. Un arranque devastador lleno de ritmo en ataque y con un trabajo defensivo tremendo, que cortocircuitaba al equipo comandado por Javier Malla que se vio abocado a pedir el primer tiempo muerto cuando solo se llevaban 3 minutos de partido. Los algecireños poco a poco se adaptan al encuentro. La entrada de Miki Ortega y de David Orrit pone orden en el hasta entonces, poco coordinado ataque de los visitantes, si bien atrás conceden mucho espacio a los tiradores de Morón, que aceptan el golpe por golpe y castigan el aro de los Campo-Gibraltareños. Algeciras ajusta por fin la defensa y encuentra ventaja en ataque a partir del 2×2 de Miki Y Revilla. Una canasta de Orrit con la bocina sonando de fondo deja un 22-20 clavado a en el electrónico a la espera del segundo periodo.
“Formación de tortuga”
Si hay algo que caracteriza a los jugadores del CB Starlabs Morón es su capacidad defensiva y en este segundo cuarto iban a hacer gala de la misma, atenazando a Udea en una tela de araña de la cual era muy difícil escapar. Los primeros instantes del cuarto se pueden resumir en lo siguiente: mal ataque de los gaditanos, rebote local, salida rápida y canasta fácil. El barullo se hace el rey de los siguientes minutos, no le sale nada a ninguno de los dos equipos que parece que se pelan por ver quien falla más. El parcial en los últimos tres minutos refleja la falta de acierto dejando el marcador en 37-30 al descanso.
De poder a poder
El tercer periodo supone un cambio radical en los acontecimientos. El relativo dominio del CB Morón se transforma en una batalla de poder a poder, donde ninguno de los contendientes cede ni un cm de terreno. La irrupción en el partido de Sergio Cecilia (ex de Morón) insufla aire fresco a los foráneos. La efectividad de Udea sube enteros a cada segundo que pasa y la férrea defensa exhibida por los locales en los dos primeros periodos comienza a hacer agua. Si no podemos atrás vayamos hacia delante. Eso parecería que les dijo José Santaella a los suyos en el tiempo muerto, ya que salieron dispuesto a contestar cada canasta, cada rebote ofensivo y cada transición con otra. Un Alameda enardecido y con ganas de acción, se pone de píe para sustentar a los suyos en cada momento del cuarto. Se aplaude todo, se celebra todo y claro está, se protesta todo. Se estaba empezando a cocinar lo que seria el desenlace del “match” y los jugadores del CB Starlabs Morón lo sabían. Los diez minutos más igualados del encuentro terminan con un 57-53, que para nada hacia presagiar lo que se viviría en el cuarto y definitivo.
Morón en su máxima expresión
El cantico de la grada retumba en los cuerpos de los jugadores, hace que se muevan los corazones locales y temblar los visitantes. Jimenez se pone el traje de General, espolea a los suyos y parafraseando a Leónidas grita: ¡¡¡ Esto es Morón!!!. La defensa de los locales se hace presente de nuevo en la pista, las banderas ondean al viento y el ataque moronense no da tregua a los adversarios. La comunión entre grada y equipo se extiende a cada minuto que pasa. UDEA se siente totalmente desbordado, los tiempos muertos no surten efecto, ya no hay nada que hacer. Los sevillanos son un martillo pilón en ataque, que no para de minar la confianza de los algecireños, a los cuales, les cuesta un mundo anotar y solo lo hacen desde el 4.70. Un parcial de 16-6 revienta el marcador que se queda clavado en el 88-71 ratificando la victoria local y haciendo que el Alameda estalle en un grito de alegría y satisfacción.
La próxima jornada será muy especial ya que el CB Starlabas Morón jugará contra Buenos Arenas Albacete Basket, pero eso será otra historia
Ficha Técnica
Imágenes Antonio R. Ramirez / Feb Baloncesto en vivo