Comienza la recta final.
Tras dos semanas de parón por las ventanas FIBA , el CB Starlabs Morón recibe en casa al SDP en un partido clave para asegurar los play-off.
Hemos vuelto, o mejor dicho vamos a volver ( si me permiten el uso del plural mayestático). Dos semanas sin competición, dos semanas de descanso relativo y de disfrutar del juego de Lio Kouadio con su selección en las ventanas, todo ello con la mirada puesta de fondo en el rival de este próximo sábado, el Clinica Ponferrada Sociedad Deportiva Ponferradina que en este artículo llamaremos a partir de ahora SDP por aquello de la economía del lenguaje. Un partido el de esta jornada que es una moneda al aire en toda regla, ya que el equipo berciano, combina actuaciones de fuste con otras de un nivel casi inexplicable. Si los dirigidos por Oriol Pozo entran rápido en dinámica y sus jugadores principales tienen el día puede ser un rival muy difícil de tumbar, ahora bien si se minimiza a esas piezas debería ser una victoria sin sobresaltos para los locales. Alargar la racha a 9 consecutivas tiene un añadido muy especial conseguir la clasificación de manera matemática para la fase de ascenso a Leb Oro, recordemos que ese era uno de los principales objetivos del CB Starlabs Morón al inicio de temporada y conseguirlo de manera tan anticipada puede ser otra inyección de moral más para la plantilla dirigida por Jose Antonio Santaella. Profundicemos pues, en lo que para mí van a ser las claves de este enfrentamiento.
Diferencia interior notable.
El primer ítem a analizar es la teórica superioridad local en los puestos interiores. La combinación de los Pavrette, Martín,Planell y Gómez es en mi opinión mucha tela para los “pívots” de SDP.Si, he puesto pívots entre comillas puesto que los castellano-leoneses no cuentan con 4 jugadores interiores al uso, casi podríamos asegurar que quitando Kanyinda su hombre más físico el resto son más cuatro que cincos que por la configuración del equipo se ven obligados a ocupar la posición de center más veces de las que a ellos le gustaría. Obviamente esto tiene sus ventajas a nivel ofensivo mayormente, es decir, la movilidad y la buena mano exterior, sobre todo del hispano- argentino Hierrezuelo son la principal arma que exhiben los ponferradinos a nivel exterior. El techo del equipo es el murciano Antonio Morales, un 208 que la temporada pasada puso en apuros al conjunto aruncitano cuando militaba en las filas del CB Tormes, pero que esta temporada no está siendo diferencial ni mucho menos para los blanquiazules. Si el CB Morón consigue encontrar a sus hombres altos con facilidad en ataque y cerrar su tablero atrás el duelo por dentro estará ganado permitiendo la fluidez de las transiciones locales y dejando espacio para los tiradores y las penetraciones que tanto les gustan a los exteriores moronenses. Aunque lo mollar del enfrentamiento está en el “back court”, ahora verán a qué me refiero.
Apostando todo afuera.
Si por dentro el equipo de la capital del Bierzo anda justo, por fuera es todo lo contrario. La pléyade de jugadores peligrosos desde el exterior del SDP es cuasi inagotable y si nos atenemos al transcurso de la temporada, podemos afirmar sin miedo al equívoco que todas las victorias del equipo que nos visita están fundamentadas en actuaciones tremendas de uno o varios jugadores de perímetro. Si estos jugadores lo pasan mal durante los 40 minutos el CB Morón tendrá amplias posibilidades de celebrar la victoria frente a la grada “el gallo”. El capitán general de las huestes exteriores bercianas es un viejo conocido de la afición local, el hijo pródigo que regresa a casa tras una estancia aciaga en tierras algecireñas, estamos hablando por su puesto de Pablo Córdoba. El base madrileño está que se sale esta temporada, es el termómetro de su equipo amén del máximo anotador, es claramente la pieza a parar. Si Córdoba no está en sus números habituales el resto de los jugadores lo nota, esto no quiere decir que no tengan recursos suficientes para que otro compañero tome el relevo del base, habitualmente esa responsabilidad recae en el Italiano Silvano Merlo. Este combo guard es una de las revelaciones del año en la Leb Plata, su rol de segunda espada lo interpreta a la perfección , vease el partido de la primera vuelta, en el cual Merlo fue el MVP local siendo el principal azote de los defensores andaluces. Una labor callada pero clave para el engranaje de los sistemas y de los triunfos del Clínica Ponferrada. Si hablamos de ir a menos a más el ejemplo perfecto para Pozo es sin dudas el alero coruñés Alejandro Harguindey que empezó algo dubitativo su camino en ponferrada pero que en las últimas jornadas se ha ido asentando como uno de los estandartes de los ponferradinos. Aunque su posición natural es la de tres en determinadas circunstancias está saliendo al 4 con la intención de abrirse a la esquina y desde ahí generar espacios para sus compañeros sacando a su marcador de la zona, una variante que Santaella tendrá que tener en cuenta y neutralizar. Además de este tridente los Parks, Letter, Montcanut, Jorge y Ndiaye serán la gran baza que esgrimirá el SDP para ganar en casa del segundo clasificado.
Sólo recordarles que el partido será el Sábado a las 18h y que podrán seguirlo por Canal Feb. Sean buenos y disfruten del baloncesto.
Imagen: Facebook del Clínicas Ponferrada Sociedad Deportiva Ponferradina