El pasar de un tiempo infinito
Aun recuerdo un finales de febrero, principios de marzo de hace dos años, cuando yo, picado por mi amigo David, echaba de menos eso de sentirse en zona prensa como antaño hacía en San Pablo (Sevilla) para Planeta Deporte. Y David que me conoce como si me hubiera parido y sabe que soy hombre de retos, me decía: “si la temporada que viene no estás ahí es porque tú no quieres”.
Y llega el 29 de mayo, día en el que dos años atrás Basket Pasión publicaba su primer artículo. Fue cuando un capricho personal echaba a andar. Y parece que fuera hace 10 años.
Aun quedamos gente de esos inicios. Gente buena. Mi familia. Recuerdo el contacto a través de Fernando, con Toño que sigue deambulando por Santiago y es mi referencia más sensata. A quien recurro cuando necesito llorar. Buen tío.
Recuerdo que Yus andaba por Canarias y me decía: es que yo me voy a ir a Madrid, Y sigue con su Estudiante. Es un tío al que quiero hasta decir basta. Un tío que me ha demostrado lo que vale una amistad.
Recuerdo a un pipiolo Álvaro. Tímido, dubitativo, que se nos ha hecho mayor y creo que Basket Pasión le está dando la posibilidad de vivir esto del baloncesto desde muy dentro. Pero nadie le ha regalado nada.
Después se han ido incorporando gente maravillosa. La sonrisa eterna, Dyrma, en Canarias, aunque no me responda al teléfono. Héctor, de los más antiguos, y su amigo Igor, al que le acabo de denegar su salida de Basket Pasión (es un tío de puta madre).
Hemos incorporado gente genial. Llámese Nerea, Vicente (la cabeza más amueblada que jamás vi), mi hermano Eros (lo voy a conocer físicamente la semana que viene). Will (para mí), wiki para todos.
Hemos sido familia cuando ellos han necesitado un abrazo. Sin prisas. Hemos puesto la web a disposición de todos esos que vienen de buenas. Y desde aquí mando un guiño de toda la web a Zamora (él sabe por qué).
O como se dice en otras lides: hemos crecido.
Hemos sido bien recibido por muchos clubes y medios. Y nos quedamos con lo bueno porque no tenemos capacidad de recordar lo malo o las malas historias.
Dos años de trabajo del duro y de diversión con el trabajo. Dos años donde en un principio teníamos que explicar quiénes éramos y donde el tiempo nos da una seriedad tan brutal que ya el nombre de Basket Pasión abre puertas.
Muchos y numerosos son los colaboradores, y permitidme nombrar a uno bueno que se marchó con dolor. Alex, llevaba al Barcelona. Y todavía estoy esperando que me llames para decirme que vuelves… Y lloraré.
Y es que no miro a Basket Pasión como un medio de comunicación y eso que alguien me lo ha calificado como mejor que muchos medios nacionales. Es que para entender Basket Pasión hay que mirarlo desde el ámbito familiar.
Por eso hoy quiero brindar, por los que están, por los que han estado y por todos los que estarán porque serán muchos.
Toño, Álvaro, Yus, Eros… La que hemos liado.
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