Pablo, lo siento, eres pasión para mí

Y creo que así te lo he demostrado a ti y a tus padres. Tío, ya no porque midas lo que mides sino porque me pareces un grande.
De hecho tenía pensado escribir algo sobre donde están los que estaban la temporada pasada en el Cáceres Patrimonio de la Humanidad, pero realmente paso mucho. Tan solo me interesan dos personas. Uno que sigue, Dani Rodríguez y otro, al que las lesiones le jugaron una mala pasada. Y, créeme, hubieras triunfado.
Sabes que tengo tu contacto y que te pregunto poco. Basket Pasión es un medio de comunicación que ante todo respeta. Y eso pretendo contigo y con los tuyos. No por ley, sino porque si me habéis tratado bien. Y por eso hoy te vuelvo a escribir. Porque tu y yo, desde diferentes puntos de vista, amamos el baloncesto, hasta morder, hasta rabiar.
Dicen que esta última temporada, la del descenso, fuera para olvidar. Y quizás, con respeto a la directiva, no sea tanto. Quizás falló hasta el jefe de prensa. Pero si te digo que yo me llevé un algo más sincero de vosotros. De ti, de tu padre y de tu “hermana”. Que se ría ella cuando lo lea.
Pablo, si te aseguro que escribiré de ti estés donde estés. Ahora en Bueno Arenas Basket aunque sin poder jugar. Y te juro que te criticaré si lo haces mal. Pero te juro que iré a degüello a quien malamente te critique. No por ti, si no por este baloncesto que amo.
Tan solo te deseo lo mejor. Que la lejanía no mine nuestro contacto. Y que pienses que lo que hice siendo jefe de prensa de un club al que amamos los dos, lo hice sin buscar nada más que vuestro protagonismo.
Tan solo te voy a pedir desde aquí, y seas tú quien lo solucione con el club, una entrevista conmigo y con Álvaro Blanco de Basket Pasión.
Por lo demás, gracias por hacerme amar este deporte.

Administrador