Rubén: el «Guerrero» de Obradoiro en la selección.

Gran partido el suyo en el choque ante Islandia, que confirma su buena proyección.
En Obradoiro no están acostumbrados a tener jugadores que integren la selección nacional. Si, que hay muchos casos de jugadores extranjeros que jugaron o juegan en sus selecciones; sin ir más lejos los hermanos Scrubb en Canadá, Blazevic en Lituania, o el mismo Hilnansson que el otro día defendió la camiseta islandesa en el choque contra España y que perteneció a la disciplina obradoirista hace unas temporadas.
Por eso, la preselección de Rubén Guerrero y de Edgar Vicedo en estas ventanas, ha llenado de orgullo a la masa obradoirista que ve como los suyos cuando se esfuerzan y hacen bien las cosas no sólo tiene repercusión esa mejora en Fontes do Sar, sino que el premio de la selección está ahí presente.
De esta vez le ha tocado entrar en los doce finales a Rubén, pero Edgar también merece un gran ovación por su esfuerzo cada semana a las órdenes de Moncho Fernández.
Pero la estrella de esta semana para la masa obradoirista ha sido nuestro Rubén Guerrero; vistiendo ese 13 nos ha llenado de orgullo a la masa obradoirista y se hace justicia con un trabajador incansable en cada partido.
Guerrero pivot de 2.13 cm, abandonó su Málaga natal para mejorar en la NCAA, y volver a Unicaja para disputar minutos en el equipo de sus amores. Pero los minutos en un equipo del nivel de los verdes están muy caros, y este año decidió embarcarse en la aventura gallega para poder evolucionar en su juego.
Y la cosa no ha ido mal, desde un casi ostracismo en Málaga ha pasado a jugar 18 minutos de media (compartiendo posición con Blazevic) y con unos buenos guarismos de 6.7 puntos, 4,3 rebotes y casi una asistencia por partido para una media de 8 de valoración en sus 20 participaciones esta temporada con Obradoiro.
Su evolución está siendo patente, y así lo confirma la llamada de Sergio Scariolo, quien le ha reconocido su buen hacer en el equipo gallego.
El pasado jueves, en la victoria de España en Islandia (61-80), jugó un buen partido con una presencia de 20 minutos, consiguiendo 8 puntos y 4 rebotes para hacer 11 de valoración.

Tipo afable, con gran sentido del humor, gran madurez personal, Rubén tiene aún mucho margen de mejora y cada partido con el Obradoiro está aprendiendo cosas. Lo bueno de este jugador es que antepone siempre el equipo a su lucimiento personal y es un soldado de los que gustan en Sar.
Estamos seguros que a final de temporada será un Guerrero con mayúsculas y mejorará ostensiblemente en aspectos que aún le cuestan en una liga tan competitiva como la ACB, pero el vestirse de rojo con ese trece es un premio que merece por méritos propios.
Este domingo tiene otra oportunidad ante Italia para reivindicarse, y seguro que lo hará bien.
Fotografias: Marbella local; FEB
