diciembre 3, 2024
image0-6

Udea afronta una complicada salida en Albacete el sábado a las 19:30.

En baloncesto todo puede ocurrir, y más cuando se unen factores como los que concurrirán en esta jornada de Leb Plata en el Pabellón del Parque en Albacete. Y es que los locales, un equipo con una situación en la clasificación más que cómoda, con aspiraciones a casi todo, pero con una derrota en el último partido y con carencias interiores que están tratando de suplir, se enfrenta a un equipo que acumula en sí mismo todos los ingredientes para ser muy peligroso.

¿Por qué peligroso Udea?

Porque viene de una victoria y busca con ilusión ganar dos partidos consecutivos por primera vez en toda la temporada. Porque con la llegada de Eleraky y su presencia interior, el factor reboteador en ataque de Vucica y Thiam puede multiplicarse y hacer daño donde más débiles son los albaceteños. Y porque Udea, llegados a este punto, no tiene ni debe tener nada que perder; simplemente no hay que mirar atrás y sobreponerse a que, como predice Murphy, todo lo que pueda salir mal, saldrá mal, y si ganas como en la anterior jornada, también lo harán los equipos de la zona baja de la tabla, por lo que solo te queda levantar la cabeza y seguir apretando. No pretende ser una lectura pesimista, sino un aliciente extra para no cejar en el empeño de conseguir los objetivos.

Albacete tiene un gran equipo, no cabe duda, con muchos partidos en sus jugadores en Leb Oro, con una zona exterior de su plantilla que es Top 3 de la competición, en la que sobresalen Alo Marín, Jacobs y Jorge Martínez, pero en la que podemos meter también al alero Diego De Blas. Además, todos y cada uno de ellos contribuyen a la faceta reboteadora, supliendo en parte esa falta de jugadores dominantes en el juego de la pintura, si nuestros bases son capaces de cerrar bien el rebote largo y capturar alguno suelto por ahí, podemos tener por seguro que Udea tendrá opciones para llevarse el partido.

Afrontar la posterior visita de Alcalá con un balance positivo de victorias sería como un nuevo renacer, como un verdadero reseteo al sistema operativo de este equipo y ahí sí que empezaríamos a ver que la travesía del desierto está llegando al tramo final, aunque para vivir esa situación habrá que empezar por, al menos, hacer las cosas tal y como hay que hacerlas y competir este partido en cada uno de sus cuartos, porque hemos podido presenciar cómo, aunque los equipos estén arriba en las clasificaciones, tienen apagones en su juego, y ahí es donde debe estar el trabajo de banquillo para hacer todo el hincapié posible en esos instantes.

Con estas líneas generales solo nos queda esperar con ganas al sábado y mandar toda la energía posible en un desplazamiento cansado y difícil, pero con varias recompensas intrínsecas a esta posible victoria.

Imagen del autor.

Autor: Antonio Lara

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *