Todos con Diego
El baloncesto gaditano y andaluz se viste de super héroe
Estamos en una época de cierre de plantillas, inicios de pretemporadas, preparación de los equipos y por supuesto la espera del mundial que empieza la semana que viene, con todos los debates que se dan alrededor de este evento. Dentro de este contexto, en Cádiz, un pequeño reducto de voluntarios se empeñó en demostrar que el baloncesto es mucho más que eso. Ayer sábado el deporte de la pelota naranja se tiñó de otro color, el color de la solidaridad, olvidando por un día las diferencias y olvidando la competitividad que subyace de enfrentarse en una pista. Árbitros, Clubs, Voluntarios, jugadores e instituciones públicas, junto a patrocinadores, aunaron esfuerzos en pro de un bien mayor con un solo objetivo: Ayudar a Diego
Diego un pequeño valiente
Un valiente, de apenas unos meses, que está luchando con una de esas enfermedades que el común de las personas denomina como “raras”, pero que son importantísimas, tanto para los que lo sufren, como para sus familiares que se ven envueltos de forma involuntaria en esa lucha. Diego y su familia están dando la batalla contra AEM (Atrofia Muscular Espinal).Una enfermad, que afecta normalmente a niños menores de 18 meses y que tiene como principal consecuencia la dificultad motora derivada de un bajo desarrollo muscular, aparte de poder derivar en otras patologías, como, por ejemplo, infecciones respiratorias. La baja tasa de afectados por esta enfermedad hace que la investigación vaya a paso de tortuga, con lo que los tratamientos existentes tienen un costo elevado, que no todas las familias están en condiciones de afrontar. Diego y sus familiares fueron el motivo, para que, hasta ayer unos desconocidos, trabajaran hombro con hombro para apoyar su causa.
Llegó el “Día D”
Día D, hora H. 8.30 am la puerta del pabellón ciudad de Cádiz repleta de gente, los voluntarios dentro, con esa mezcla de nervios e ilusión que siempre se tiene antes de empezar cualquier evento, al cual le has dedicado mucho tiempo. Los primeros en abrir el fuego fueron lo más pequeños, ansiosos, por como diría un argentino, empezar a picar la pelota sobre el parqué. Un poco más tarde empezaron a llegar, los cadetes y juniors, para enfrentarse por un lugar en las fases finales que tendrían lugar por la tarde, aunque en un ambiente de convivencia increíble. Tras el correspondiente parón para comer y reponer fuerzas, comenzaban los platos fuertes de la jornada: la fase final de los peques (y no tan peques) y la competición senior, para lo cual se contó de la ayuda de los árbitros de la AD Eres Arbitro, apoyados por miembros de la ADAB, para controlar el momento más competitivo, dentro del buen rollo general. El torneo contó con la participación del árbitro internacional Joaquin Garcia, que donó una camiseta para su posterior sorteo, con el fin de seguir sumando recursos para Diego.
En cuanto al nivel deportivo del torneo, fue muy alto, en categorías inferiores hubo jugadores de clubs de formación muy importantes de Andalucía, algunos de ellos campeones de España. La categoría senior masculina fue una mezcla de jugadores de liga EBA, Primera nacional andaluza, con canteranos del Real Betis e ilustres veteranos de la provincia que hicieron las delicias de los presentes, a base de acciones de calidad, triples “from” de logo e incluso algún que otro matazo. En Femenino hubo mucha participación de jugadoras de la primera división andaluza, de las selecciones gaditanas y de la Selección Andaluza, en definitiva, un torneo de un nivel tremendo, a pesar de que en este caso sea lo menos importante. Las instituciones públicas también se hicieron presentes en el torneo, con la presencia del concejal de Deportes de Cádiz: Carlos Lucero, que no solo estuvo volcado con la organización del evento, sino que también, se vistió de corto y saltó a la pista disfrutando como jugador y la presencia de la concejala de Accesibilidad: Nuria Álvarez.
Echando el cierre
Se acabaron los botes, el sonido de los balones atravesando las redes, se van apagando las luces del pabellón, toca recoger y tomar un poco de aire, tras el esfuerzo realizado. Cansados por el largo día, algunos voluntarios, hablan con el aire fresco de la brisa gaditana en sus caras, coinciden en afirmar que mereció la pena el madrugón, mereció la pena las horas de pie, mereció la pena el esfuerzo de los días anteriores para que todo estuviera listo y por supuesto, mereció la pena ese vacío físico que te permite estar lleno. El término “valorcesto”, tan carente de sentido otras veces, ayer resurgió con fuerza, en el Ciudad de Cádiz, gracias al esfuerzo de todos los voluntarios y a la actitud festiva de los participantes. Diego y sus padres no merecían menos de nuestra parte, si digo nuestra, se llevaron nuestro esfuerzo y ganas, amen de una cantidad económica tan necesaria para que Diego siga luchando, pero y ¿Nosotros que no llevamos? Pues una felicidad inmensa, basada en ayudar al otro y la sensación de, que, aunque sea por un día, fuimos una familia. ¡¡¡¡ Gracias a Todos!!! ¡¡¡ Todos con Diego!!!
Fotografía Organización del Torneo