Vuelo cancelado

Hacer la goma: Dícese de un equipo que no consigue romper el partido en ningún momento mientras que su rival va aumentando o disminuyendo su desventaja poco a poco pero sin conseguir darle la vuelta a la tortilla y ganar el encuentro.

Romper la goma: Teniendo en cuenta el término de “Hacer la goma” explicado en el párrafo anterior, es el término que indica que el equipo en desventaja encadena una buena racha y le da la vuelta a la tortilla para acabar llevándose el partido.

Con estas definiciones ya podemos empezar la crónica. El sábado 9 de Diciembre fuimos testigos de la que Jaume ha bautizado como “La mayor cagada en lo que llevamos de temporada” (no con estas palabras pero sí ha dicho algo parecido), la patinada en cuestión fue la derrota frente al Breogán 68 a 76, pero bueno, vayamos por partes.

El partido empezó como tendría que haber empezado, con un Bilbao Basket siendo una apisonadora tanto en ataque como en defensa y llevado en volandas por la afición y un Breogán que defensivamente estaba haciendo los deberes pero ofensivamente estaba fallando más que una escopeta de feria. Al final del primer cuarto el Bilbao Basket nos dió una pequeña píldora de la montaña rusa de concentración que iba a suceder en todo el partido, ya que en los compases finales del cuarto pasamos de ser una apisonadora a ser una bicicleta con ruedines, cosa que aprovechó el equipo lucense para acercarse en el marcador y acabar así el primer cuarto con un marcador de 22 a 13 a favor de los locales.

En el segundo cuarto la desconexión fue total y no fuimos capaces de encontrar referentes ni ofensiva ni defensivamente. Cosa que sí hicieron nuestros rivales y gracias a su acierto exterior y a que consiguieron anular a nuestro pívot Sacha Killeya – Jones fueron capaces de recortar distancias, aunque no llegaron a ponerse por delante, gracias a un parcial de 12 a 18, el cual llevaba el marcador al descanso con un apretado 34 a 31.

A la vuelta de los vestuarios volvimos a ver un cuarto relativamente igual que el primero, por lo menos en sensaciones ya que parece ser que el tirón de orejas de Jaume surtió efecto ya que los hombres de negro salieron confiados y volvieron a llevar su ventaja por encima de los 10 puntos hasta que, como siempre, volvieron a no confiar ni en ellos ni en la victoria, así que como al inicio del partido el Breogán lo aprovechó y el cuarto acabó con un parcial de 19 a 18 a favor de los locales.

Con el marcador de 53 a 49 se repitieron las mismas dinámicas que se llevaron a cabo, un Bilbao Basket anulado en todos los sentidos y un Breogán muy serio, bastante acertado y con un una defensa interior increíblemente fuerte, la cual fue capaz de secar prácticamente al completo la ofensiva del equipo bilbaíno. Teniendo todo esto en cuenta el equipo gallego rompió la goma que llevaba haciendo todo el partido y fue capaz de darle la vuelta a la tortilla gracias a un parcial de 15 a 27 para dejar el marcador final en 98 a 76.

En aspectos generales nuestro mayor problema fue el del apartado de las pérdidas ya que, gracias a la defensa que planteó Mrsic perdimos un total de 17 balones mientras que ellos perdieron 13, que tampoco es que sea una maravilla pero sí que es mejor que 17. En los demás apartados estadísticos los dos equipos estuvieron parejos menos en los tiros libres, la cual es otra de las asignaturas pendientes desde hace años. Mientras que el Breogán anotaban 10 triples de 12 intentos (83.3%) nosotros anotabamos 5 de 8 intentos (62.5%).

Respecto al apartado individual nuestro mayor referente fue, sorprendentemente para todo el mundo, el ala – pívot Denzell Andersson, el cual parecía ser el único que quería jugar a baloncesto y acabó el encuentro con 12 puntos y 3 rebotes en 26 minutos y 6 segundos. Junto a él estuvo Adam Smith, por lo menos al principio del partido y acabó este con 14 puntos, 7 asistencias y 1 rebote. Cabe recalcar también los 11 rebotes y 4 asistencias de Alex Renfroe, aunque no fue capaz de encontrar el aro anotando únicamente 2 puntos.

En la otra cara de la moneda quiero hablar del otro pívot que jugó ayer. Como ya avisé hace un tiempo, la baja de Hlinason ha hecho que Giorgios Tsalmpouris tenga más protagonismo en el puesto de 5 y esto fue otro de los factores claves en la derrota. Lo siento mucho por el jugador griego pero el equipo con él o con Sacha en cancha era totalmente distinto ya que en los casi 12 segundos que jugó (no todos fueron en la posición de 5 ya que también jugó algo de 4, una posición donde juega mejor) éramos nulos tanto ofensiva o defensivamente y el Breo hacía lo que quería con nosotros.

Por parte del Breogán sus referentes fueron Stefan Momirov con 14 puntos, 1 asistencia y 2 rebotes en casi 35 minutos y Justin Anderson con 15 puntos, 3 asistencias y 3 rebotes en poco más de 25 minutos. También es nombrable las actuaciones de Juan Fernández que en 25 minutos y 17 segundos anotó 6 tantos, dio 3 asistencias y cogió 11 rebotes y de Sergi Quintela que hizo 7 puntos, 8 asistencias y 3 rebotes casi 26 minutos.

Sinceramente, soy un fiel defensor de Jaume Ponsarnau, me gusta como entrenador y como persona me parece la hostia, pero la culpa de la derrota de ayer la tuvo él. No supo pedir tiempos muertos para parar la ofensiva breoganista cuando se acercaban y no fue capaz de dar más minutos a un Melwin Pantzar que viene con ganas de ser muy protagonista en la ACB.

Por lo demás no tengo nada que decir, no sirve de nada asaltar la Fonteta si luego viene el Breogán y te pinta la cara en Miribilla, vuelvo a estar enfadado con el equipo porque no hay ni seriedad ni creencia en la victoria y son cosas fundamentales si queremos quedar entre los 16 mejores como mínimo. Yo me despido, nos vemos en la previa del partido frente al Oporto, agur!

(Imagen de EITB)

Parciales: 22 – 13, 12 – 18, 19 – 18 y 15 – 27

Estadísticas individuales:

– Bilbao Basket: Killeya – Jones (11, 2, 6), Smith (14, 7, 1), Renfroe (2, 4, 11), Andersson (12, 0, 3), Rabaseda (6, 2, 8), Kullamae (3, 2, 1), Reyes (6, 0, 3), Pantzar (8, 0, 3), De Ridder (2, 0, 2) y Tsalmpouris (4, 0, 1).

– Breogan: Momirov (14, 1, 2), Anderson (15, 3, 3), Frankamp (7, 3, 1), Sajus (5, 0, 3), Polite (0, 1, 1), S. Quintela (7, 8, 3), Fernández (6, 3, 11), Jogéla (9, 2, 4), Ventura (7, 0, 2), Rudan (6, 1, 1) y E. Quintela (0, 1, 0)