Game over

Lo veníamos diciendo y, aunque matemáticamente aún hay opciones, a la vista del juego y las sensaciones de las últimas 3 jornadas todos tenemos claro que, salvo sorpresa mayúscula, Bàsquet Girona se ha borrado él solo de la lucha por la Copa del Rey.

Primer tiempo: Irregulares pero salvando el partido

Arrancamos ya el partido con mucha irregularidad entre cuartos y con muchos fallos evitables. en el primer cuarto obtuvimos un gran acierto en el tiro de 2 con un 70% (7 de 10) pero un malísimo 12% (1 de 8) en triples, lo cual no fue suficiente para evitar que Bilbao Basket se pusiera al frente en el marcador con un 22-17.

En el segundo cuarto se intensificó la labor defensiva y los porcentajes se invirtieron, pasando a un nefasto 30% en tiros de 2 pero compensado por un gran 71% (5 de 7) en triples; todo ello sirvió para llevar el marcador hasta la máxima ventaja de +12, que los vascos ya consiguieron reducir en los últimos minutos gracias a los tiros libres para irnos al descanso con un relativamente cómodo 34-40 que nos hacía pensar que esta vez sí, podríamos llevarnos una victoria sin sufrir y seguir vivos en la lucha por la Copa.

Segundo tiempo: Volvemos a las andadas

Pero no, ilusos nosotros los aficionados del Bàsquet Girona veíamos cómo una vez más volvemos a lo de siempre y cada partido que pasa las sensaciones son peores. Al poco de arrancar el tercer cuarto los hombres de negro consiguieron un parcial de 13-0 (54-58) para ponerse por delante en el marcador y los gerundenses ya serían incapaces de volver a mandar en el marcador, a pesar de llegar a ponerse solo a 2 puntos al final del tercer cuarto (58-56).

En el tercer cuarto nos quedamos con un irrisorio 33% tanto en tiros de 2 (3 de 9) como en tiros de 3 (2 de 6) y en el último cuarto aún fue peor, igualando el 33% en tiros de 2 y bajando hasta un 25% en triples, para llegar al definitivo 80-74.

Analizando los problemas

La imagen de las últimas 5 jornadas está siendo peor a cada partido, incluso en la única victoria de la serie contra Morabanc Andorra, pero ¿por qué un equipo que nos ilusionó al empezar la liga, incluso situándose líder de la competición, está decepcionando tanto últimamente? Vamos a intentar desentrañar la situación.

Para empezar ya se empiezan a oír voces entre la afición que piden la cabeza de Salva Camps; es un entrenador novel en la figura de principal y del que seguramente se esperaba más, pero últimamente la sensación es de que no toma buenas decisiones, le falta sangre a la hora de hacer autocrítica y tomar decisiones drásticas y no es capaz de cambiar su libro de ruta cuándo el equipo lo necesita.

Tampoco se entiende que, por ejemplo en el partido de ayer, jugadores como Fjellerup, Vila, Quino y Sorolla no tuvieran más de 5 minutos cada uno y se mantenga en pista un Ike Iroegbu que en la segunda parte se veía claramente que estaba fundido o a un Davis que, lamentablemente, ayer no tenía el día y solo obtuvo 4 puntos y un 1 de 7 en triples.

A esto debemos sumarle la planificación deportiva del equipo: acaba de irse Markel Brown y no hay indicios de que vaya a venir ningún recambio, además en un equipo ya de por sí corto y con algunos jugadores de nivel discutible si realmente se quiere hacer un equipo competitivo para soñar con cosas grandes en la ACB. A corto plazo sería imprescindible el fichaje de un pívot y un escolta.

Y si vamos a más largo plazo nos vemos una situación igual que la del año pasado: los mejores jugadores de la plantilla como Juani Marcos o Sergi Martínez son cedidos del Barça, por lo qué posiblemente el año que viene no continúen en Girona, y jugadores como Ike o Yves es fácil tengan ofertas de equipos más consolidados como ocurrió el año pasado con Roko; eso significa que nos encontraremos otra vez con los jugadores que no tienen un nivel aceptable para la competición y habrá que volver a fichar a jugadores más o menos desconocidos esperando que salga bien la jugada; y así no se hace una buena planificación, necesitamos jugadores que puedan mantenerse en Girona y consolidar la base de la plantilla durante unas temporadas.

Ojalá nos equivoquemos, consigamos algunas victorias en las próximas jornadas y cambie la situación, pero a la vista de lo expuesto no podemos ser optimistas a día de hoy; aunque debemos reconocer que los jugadores de Bàsquet Girona han demostrado cuando han querido que pueden competir de tú a tú con cualquier rival; veremos si Salva Camps consigue tocar la tecla y dar un giro de timón para, como mínimo, acabar la temporada con tranquilidad y no sufrir como el año pasado.

Ficha del partido

80 – Surne Bilbao Basket (22+12+24+22): Pantzar (11), Adam Smith (3), Rabaseda (6), De Ridder (3) y Killeya-Jones (19) -cinco inicial-; Renfroe (20), Kullamae (2), Alex Reyes (3), Andersson (4), Hlinason (9) y Tsalmpouris.

74 – Bàsquet Girona (17+23+16+18): Iroegbu (17), Juani Marcos (16), Sergi Martínez (9), Pons (5) y Goloman (13) -cinco inicial-; Colom, Davis (4), Fjellerup, Susinskas (6), Vila (2), Sorolla y Djordjevic (2).

Árbitros: Emilio Pérez Pizarro, Javier Torres y Guillermo Ríos. Eliminados por faltas, el local Pantzar (m.40) y el visitante Susinskas (m.36).

Incidencias: Partido de la jornada 15 de la Liga Endesa disputado en el Bilbao Arena ante 8.075 espectadores. Dato oficial. Se llevó a cabo la campaña de recogida de peluches en el centro de la pista lanzados por los aficionados que acudieron al encuentro.

Imagen obtenida del ACB Media Center.