Se nos va una leyenda
Las negociaciones con Bojan Dubljevic no han dado fruto y el jugador se va entristecido.
Nació el 24 de octubre de 1991 en Montenegro y él ya sabía que le gustaba el baloncesto y quería dedicarse a ello de manera profesional.
Su carrera profesional comenzó en el 2009 con el equipo Lovcen Cetinje, luego se fue a jugar desde el 2010 a 2012 en el Budućnost Podgorica antes de firmar un contrato con Valencia Basket, el cual duraría tres años, y con gran suerte que el contrato se le alargó a 11 temporadas, de esas 11 temporadas ha levantado 4 títulos y ha recibido premios de las manos de grandes jugadores como ha sido este año que ha recibido el premio MVP de las manos de Rafa Martínez, también ex jugador taronja.
Cuando el vino a Valencia en una parte él decía tener miedo, ir a un país nuevo donde no sabes que te va a venir ni que va a pasar, o pensar que no vas a entender a nadie le daba miedo, pero se encontró con un equipo que más que equipo era una familia donde a él se le acogió genial desde un principio, le ayudaron con todo lo que él no entendía o no sabía, lo cual nos muestra que el Baloncesto no solo une a gente por un equipo, nos muestra que desde el momento uno en el que una persona se esfuerza y dedica su tiempo a aprender todo desde un inicio por un cambio de idioma tan brutal como el que él ha vivido, siempre habrá gente que te ayude y apoye sin importar nada más.
Como muchos han dicho Bojan vino siendo un niño, y se podría decir que ha alcanzado su máximo esplendor en el equipo valenciano, el ha jugado con grandes figuras como Rafa Martínez, Sam Van Rossom…pero ahora no solo se va como adulto, se va como parte de la familia taronja, se va como un jugador que ha pasado su vida aquí con este equipo, se va habiendo crecido tanto que al final se convirtió en padre.
Lamentamos mucho que esta última temporada como jugador taronja haya sido tan deplorable, donde nos ha faltado ver a un jugador con más sangre en el cuerpo, hemos visto a un jugador que en muchas ocasiones jugaba como nunca, con ganas con ánimo, pero en otras muchas ocasiones le faltaba esa chispa que ha mostrado durante todos estos años en este equipo.
Jugador que lo ha dado todo que ha dado de lo que nadie pensaba que haría, es uno de los jugadores que no se ha dejado llevar por los malos comportamientos que hay en el vestuario y que por suerte y por lo que se está viendo ya no habrá más, es un jugador que siempre ha seguido las instrucciones de Mumbrú, desde el momento uno, cuando llegó Mumbrú a Dubljevic se le hizo adelgazar para poder rendir mejor, aunque no haya sido así le agradecemos todo lo que ha hecho por este club.
Y a pesar de que se va del club tras no llegar a ningún acuerdo en las negociaciones, se puede decir que este jugador forma parte de la ciudad de Valencia, no solo por el tiempo que ha pasado aquí, si no por los logros que ha conseguido con el equipo y por todo lo que ha aportado, además el no se olvidará de la ciudad ya que su vida también ha quedado marcada por el nacimiento de Petar, el primer hijo de Bojan Dubljevic, que como curiosidad comparte la semana de nacimiento con Mateo, primer hijo de Sam Van Rossom.
Tras todo lo jugado, luchado, ganado y perdido a Bojan Dubljevic no solo se le conoce como jugador taronja o el montenegrino, él se ha ganado a pulso los siguientes apodos “Dubi” “El valenciano de Montenegro” “La Roca” “El Carnicero de Podgorica” “Gladiator” “El talento de Niksic” todos estos apodos se los ha ganado durante todo el tiempo que ha estado aquí.
La camiseta con el dorsal número 14 subirá al techo de la fonteta o del Arena Roig cuando esté jugador finalice su carrera profesional como jugador de Basket, su camiseta colgará junto con la de otros grandes jugadores del Valencia Basket como son Nacho Rodilla, Victor Luengo, Rafa Martinez o con el recién retirado del equipo Sam Van Rossom que jugará una temporada más en un equipo Belga y tras eso se retirará del Basket.
Desde Basketpasion queremos agradecer de primera mano todo lo que esté jugador ha aportado al equipo, todo lo que nos ha aportado, los títulos ganados y esa sonrisa que nos sacaba cuando el presentador gritaba su nombre, nos quedamos con todos los buenos momentos que hemos vivido con él durante sus 11 temporadas, pero también compartimos con gran pesar la marcha de este jugador, que por 11 temporadas hemos considerado el taronja más longevo del equipo, por llevar más tiempo aquí que en otros equipos.
Ahora él se lleva un pedacito de Valencia con él y nosotros llevamos a un montenegrino en nuestro corazón.
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