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Vuelve el derbi más castellano

Burgos puede presumir de ser la única ciudad de toda España con dos equipos en la Primera FEB, un lujo, pero también una dificultad. Es verdad que de momento afición no les falta, pues tanto El San Pablo, como el Tizona, llenan los estadios con cada juego. Es que, afición de baloncesto, es algo que se palpa, se siente, apenas se recorren algunos bares de la ciudad. Cada uno con sus seguidores, con su pabellón, (El Plantío y el Coliseum), y con sus creencias. De alguna manera los dos equipos rivalizan sin mayores problemas, salvo algunos incidentes aislados, o cuando llega un derbi. Aquí la cosa se calienta, ya que los dos quieren conseguir la victoria, y sobre todo poder decir que representan a la ciudad. Sin embargo, ambos son genuinos representantes de la ciudad del Cid, habiendo ganado, cada uno cosas distintas, pero todas muy válidas.

Esta vez nos encontramos de nuevo frente al derbi San Pablo – Tizona, o Tizona San Pablo, como nos guste más, y los dos equipos llegan de diferente forma a este encuentro.

Los dos equipos

Por parte del San Pablo, el equipo viene de una dinámica muy positiva de resultados. Primero en la clasificación general, con solo 2 derrotas y un inmenso número de victorias. Es el candidato número 1 al ascenso y así lo demuestran los números. Como también lo demuestran los números en el presupuesto económico del club. Tiene una plantilla que bien podría estar ya jugando ya en ACB, con nombres de alto nivel. Didac Cuevas, Alex Barrera, Gonzalo Corbalán, Alex Gudmundsson, Wembi, Fisher, Lapornik y un largo etc. Todos con pasado en ACB o en primeras ligas europeas. Y todos, vuelvo a decir, gracias a un presupuesto elevadísimo, si no el más elevado de toda la liga.

El Tizona, parte de la herencia dejada el año pasado por Diego Ocampo, que con un equipo recién ascendido, y un presupuesto muy contenido, dio la sorpresa clasificándose hasta la Final Four. Todo un logro para un equipo con pocos nombres propios y muchos chicos jóvenes, en formación.

Tras la salida de Ocampo ha tocado recomponerse y se ha confiado en Salva Camps para intentar acercarse a los números del año pasado. Es verdad que también se ha reforzado, han llegado otros chaveles jóvenes como Lance Jones, Jordi Rodríguez o Tidjan Keita y algunos veteranos como Mo Soluade o Jaume Lobo. Es un equipo balanceado, que con mucho esfuerzo está donde está (6to).

La diferencia de plantilla se nota, también de presupuesto, pero de ambición están parejos. Ésta justamente es la baza del Tizona, el deseo, la ambición, el esfuerzo, que tendrán que poner para salir adelante, si es que quieren llevarse la victoria del Coliseum.

El derbi está servido, que gane el mejor, seguro que será un equipo de Burgos.

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