Fuenlabrada, el siguiente reto para Palencia.

Dadas las vicisitudes del calendario actual, se avecinan dos jornadas complicadas para el Súper Agropal Palencia, no sólo por los dos titanes que se aproximan, si no por la proximidad de los partidos en cuestión que se disponen a poner a prueba el, hasta ahora, sólido juego del conjunto castellano.
Tras el magnífico partido de hace unos días contra uno de los grandes, el Monbus Obradoiro, que se convirtió por méritos propios en el mejor encuentro disputado por los palentinos, con una trabajada victoria en casa (91-83) y un monumental juego en equipo, llega una zona complicada del calendario con dos partidos muy importantes en menos de cinco días que pondrán a prueba la maquinaria perfectamente engrasada de Luis Guil y los suyos.
Dos grandes pruebas de fuego en menos de 5 días: Fuenlabrada y Ourense.
El primero de estos duelos, de la decimoprimera jornada de liga regular Primera FEB, tendrá lugar el miércoles 11 a las 20:30 en Fuenlabrada, en el Pabellón Fernando Marín, contra el actual líder de la tabla, el Flexicar Fuenlabrada, una máquina imparable que trae consigo una racha de 8 victorias y una fuerza indiscutible. Comandado por Toni Ten, que sustituyó en noviembre a Rubén Perelló, gran entrenador que partiría de nuevo hacia tierras alicantinas para intentar solucionar la debacle actual en la que se encuentran los alicantinos, el equipo madrileño se posiciona como uno de los claros aspirantes al ascenso, a pesar de que el año pasado quedara justo a las puertas de los playoffs. Me consta, salvo noticia de última hora, que Tanner McGrew, jugador que militó en filas palentinas el año del ascenso y muy querido por la afición, sigue lesionado. Sin embargo, la polivalencia y fuerza de los madrileños y la calidad que rebosa en su plantilla les hace ser extremadamente competitivos y muy peligrosos con esas transiciones rápidas que tanto les caracterizan y los envites iniciales del conjunto, que pueden llegar a ser muy dolorosos, como ya hemos visto en jornadas anteriores. Figuras como el base francés Westermann o el escolta estadounidense Jorgensen (antiguo jugador, por cierto, del Chocolates Trapa Palencia), Iván Cruz (que nunca defrauda) o Nwogbo. Mención especial a Fernando Zubriggen, el sensacional base argentino que está siempre dispuesto a todo, controlando el juego y con una grandísima, y peligrosa, capacidad para cazar rebotes que puede llegar a marcar la diferencia. Hasta ahora solo el todopoderoso San Pablo Burgos ha sido capaz de vencer al conjunto madrileño, un claro indicativo de la actual situación del equipo.
El Palencia debe seguir en la línea de lo visto en casa contra el Obradoiro.
En cuanto al Súper Agropal Palencia, el equipo palentino se encuentra en su mejor momento en lo que va de temporada. Con una racha de cinco victorias seguidas y situado en un cómodo quinto puesto de la tabla, los castellanos están dispuestos a ejecutar su mejor versión tras el magnífico partido jugado en casa contra el Monbus Obradoiro, donde se vio trabajo en equipo, mejora en todos los aspectos a trabajar en el pasado y unas potentes rotaciones que demuestran que el equipo comienza a tener esa química que se antoja indispensable en baloncesto. La labor de Guil en mejorar cada día un poco más está siendo indiscutible. La polivalencia como conjunto, a pesar de que es innegable que unas estrellas brillan más que otras, que tanto comentaba el técnico sevillano, está ahí y funciona. Individualmente se ven mejoras en jugadores que comenzaron de manera muy discreta y que de una u otra manera han ido mostrando complacientes actualizaciones de sí mismos. Ponemos como ejemplo el caso del sueco Tobias Borg, que a pesar de mostrar una clara irregularidad según los encuentros, el triple que ejecutó contra el Obradoiro al final del partido de la jornada anterior se convirtió en un elemento fundamental para obtener la victoria. Aunque el escandinavo debería trabajar un poco más sus propias pérdidas. Alec Wintering llevó a cabo su mejor partido de la temporada. Y es que el estadounidense de pasaporte jamaicano ha ido superándose a sí mismo en cada encuentro, convirtiéndose por méritos propios en una pieza fundamental de su conjunto. El resto de nombres ya los hemos ido repasando poco a poco con cada crónica, balance y previa. El Súper Agropal Palencia está funcionando muy bien en general, y también en particular. Es una auténtica delicia ver en movimiento al dúo Krutwig-Vaulet o la mano de triples imposibles de Adam Kunkel. O las rotaciones o asistencias que terminan con un Kamba volando hasta el machaque.Lo único que me preocupa ligeramente, especialmente cuando se acercan partidos tan complejos como los que afrontan los palentinos esta semana, es el porcentaje de tiros desde los 6,75, que si bien han mejorado progresivamente, hay momentos en los que no sólo se puede tirar de un Kunkel para el grueso de un partido, y considero humildemente que ese es, ahora mismo, el talón de Aquiles del equipo castellano.
Imagen: @ferropenico.basket para instagram de Súper Agropal Palencia
