Queríamos llegar hasta aquí: lo tenemos

Pero os conozco. Os voy conociendo de maravilla a todas vosotras y a esos maestros que andan en el banquillo y a los monstruos y “monstruas” que hacen que todo esto sea viable y que pocas veces dan la cara.

Sé que no os conformáis solo con esto. Lo sé porque yo tampoco me conformo. Lo hecho está genial. Pero toca poner la guinda al pastel y eso pasa por el día 3 y por el día 10. Son los primeros pasos a dar.

Es lo que hay

El día 3 tendréis que hacer lo imposible para viajar a competir, y tenéis que darlo todo para ganar. Hacerlo por todo Zamora. Es imposible que se produzcan muchos desplazamientos. No estaremos físicamente pero estaremos desde las televisiones gritando y empujando para que este sueño empiece a ser realidad.

No me importa quedarme afónico si eso ayuda. Gritaré hasta que escuchéis mis voces en Azkoitia. Lo haré por la pasión que le tengo al baloncesto y por el cariño, amor y respeto que os tengo, CD Zamarat o Recoletas Zamora.

Daré todo de mí desde la distancia y eso empieza por este escrito, dejando salir todo del corazón. Pondré el día 3 luces naranjas por toda la casa y compraré una botella de cava para abrirla al final del partido, porque sé lo que ocurrirá. Por eso confío en vosotras.

Y pensaréis: Javi que esto es a dos partidos.

El día 10 será ganar o morir

Y tendréis razón, pero lo que el rival no sabe es que seremos más, muchos más. Centenas y centenas de aficionados que van a morir con el equipo. Porque os merecéis todo el apoyo del mundo y Zamora se merece vuestra victoria.

Tan convencido estoy de todo que yo mismo seré el primero en empujaros, en jalearos, en alentaros. Y lo haré in situ. Ya se lo dije a Sarah: “I would have done it a hundred thousand times”.

Todo porque tengo ganas que mis manos revienten aplaudiendo cada jugada. Tengo ganas de volver a sentir en mi cuerpo ese ambiente que sentí el otro día cuando disfrutaba del baloncesto. Tengo ganas de ver sonreír a Zamora, a la bella Zamora, por una victoria merecida.

Sé que pido mucho y sé que no es fácil. Sé que hay que jugarlo, que se trata de 5 x 5 y que en 40 minutos puede pasar de todo. Pero mirar lo que ha pasado en todos los 40 minutos que habéis jugado. Mirar donde habéis llegado.

Ir a ganar y regresad para que el día 10 sea motivo de alegría. Dadme un motivo para llorar de felicidad. Hacedlo por Zamora, por vosotras mismas, por la afición. Hacerlo por mí.

¡Vamos Recoletas!