Confirmar las buenas sensaciones

Aún no nos hemos recuperado de la primera victoria del HLA Alicante y ya tenemos otro enfrentamiento encima, cortesía de la pasada jornada intersemanal. Ahora viajamos al Wizink Center de Madrid a enfrentarnos al Movistar Estudiantes, equipo que cada vez ve con más necesidad la obligación de recuperar la categoría perdida hace un tiempo y que siempre es un rival durísimo, más aún en su casa.
El partido se disputará el próximo domingo día 15 a las 18.30 y pondrá a prueba la renovada imagen que el equipo parece estar asomando tras la victoria en casa contra Guipúzcoa y el disputado partido en casa de San Pablo Burgos. El nuevo ímpetu y energía que parece haber implementado Rubén Perelló desde su llegada se va a ver envuelto en un examen constante ya que, la terrible racha negativa heredada, nos obliga a recuperar victorias y buenos resultados a marchas forzadas.
No quiere decir ésto que tengamos la obligación (ni mucho menos, y menos mal) de ganar en casa del “Estu”, pero los alicantinos queremos seguir viendo la evolución y, sobre todo, actitud, algo de lo que el equipo estuvo muy falto hasta hace unos pocos partidos. Las victorias vendrán.
Nada imposible en baloncesto
Por supuesto, los que conocemos este deporte sabemos que el partido será difícil pero no imposible. Todo puede pasar, partimos de 0-0 en igualdad de condiciones y nosotros vamos con hambre y rabia contenida. Una hipotética victoria sería la mejor de las muestras de que el Lucentum ha vuelto.
Luego está la realidad objetiva, seguimos en descenso y al menos a dos victorias de entrar en zona de salvación, mientras que nuestro rival frecuenta la zona alta: tercer puesto con 10 victorias y solo una derrota, empatado con el líder (Fuenlabrada) y el co-líder (San Pablo Burgos) Éste último estuvo a un pelo de encajar su segunda derrota precisamente contra nosotros, quien dice que no podemos ponerles las cosas igual de complicadas ahora al equipo madrileño.
Uno de los favoritos al ascenso
Mientras el Estudiantes esté en esta categoría va a ser uno de los grandes favoritos a subir de nuevo a ACB, pero la presión por conseguirlo siempre estará sobre ellos. El equipo comandado por Pedro Rivero, viejo conocido de la afición alicantina por su paso en la cancha y los banquillos, tiene un auténtico equipazo y otra oportunidad única para subir.
Jugadores como Pato Garino (tercer mejor porcentaje de tiro de 3 de la competición con 58% de acierto) o Jayson Granger (máximo asistente de la liga con 6,36 app y tercer máximo anotador con 16,18 ppp) son jugadores que podrían estar en una división superior perfectamente. Mus Barro, que la temporada pasada cuajó una gran actuación en nuestras filas, este año está a un nivel todavía superior (en el top 10 de mates y tapones a favor) y forma una gran pareja con Dejan Kravic, sexto reboteador con casi 7 rebotes por partido. Bien acompañados de los excelentes tiradores Francis Alonso y Devin Schmidt.
Un equipo más que respetable pero que también supone un buen reto para un Lucentum que queremos creer que está en pleno despertar.
Imagen de Pilar Cortés.
