Comienza el camino por las medallas
La selección serbia se estrena en los JJOO contra la selección más difícil de la competición, el combinado de estrellas estadounidense
Tras la controvertida inauguración de los Juegos Olímpicos de París 2024, realizada por primera vez fuera del Estadio Olímpico, con el desfile inédito de las delegaciones nacionales de los países participantes por el río Sena, con actuaciones discutibles por diversos sectores y con algunas particularidades de la inauguración de los Juegos franceses, donde se arriesgó en una apuesta sin ensayos previos y con riesgo de lluvia y que desde las redes sociales ha sido duramente criticada, donde la han calificado de “broma en los Juegos Olímpicos más caros de la historia”, con un despropósito inicial que terminó en un gran final, con Céline Dion como broche final o Rafael Nadal recibiendo la llama olímpica de Zinedine Zidane como uno de los últimos relevistas de la antorcha, en un guiño al mejor tenista que ha existido sobre arcilla y posiblemente el mejor deportista español de la historia, se lanza al aire el primer balón este sábado 27 de julio, con la selección española y la australiana, entre otras, en liza en la primera jornada.
El cuadro correspondiente al grupo C de la primera fase nos deja un interesantísimo duelo entre las selecciones balcánica y norteamericana, que ya tuvo un precedente días atrás en el que venció con claridad la selección dirigida por Steve Kerr.
Día del debut, clave para el devenir del torneo
Normalmente el primer día marca el resto de la competición en torneos tan cortos como éste, donde estar presentes en París es un éxito para la mayoría de las selecciones, pero este axioma no se puede aplicar en este caso al enfrentarse Serbia en su estreno olímpico a la todopoderosa selección de los Estados Unidos.
Aunque siempre hay ejemplos para el optimismo, buscando un símil futbolístico español, en el mundial de Sudáfrica de 2010, España empezó tropezando con Suiza en su primer partido y terminó alzando el cetro mundial del fútbol. Los serbios intentarán minimizar su “derrota anticipada” ante los jugadores estadounidenses, para salir indemnes y continuar con la vitola de favoritos a las medallas que le otorga su condición de subcampeones mundiales, título conseguido el verano pasado en la final ante la Alemania de los hermanos Wagner y Dennis Schröder.
Posibilidades reales ante el combinado USA
Si tuviéramos que apostar por un vencedor en este partido, la proporción de posibilidades de victoria se acercaría a un 90-10 a favor de USA. No sólo por el precedente en el partido amistoso más reciente entre ambas selecciones, sino porque USA llega imbatida (con un único susto ante la sorprendente Sudán del Sur) y es la principal potencia mundial en la historia del baloncesto. Es verdad que hay ocasiones en las que ha caído derrotada, pero se circunscriben a circunstancias donde el equipo nacional estadounidense no se había tomado en serio la competición, en este caso, si hay una competición internacional que valoran los americanos, ésta es los Juegos Olímpicos, donde una clasificación final de medallas, donde el oro es el metal más codiciado, puede aupar a su país a la supremacía del deporte mundial, en lucha contra otras potencias, antiguamente contra la extinta URSS y en la actualidad contra otros países como China. La mayor muestra de su interés en conseguir el oro es ver a los componentes seleccionados para el equipo olímpico, una pléyade de estrellas.
Al final, la previa serbia a este partido se reduce a hablar del rival, debido a su entidad, más que a valorar los recursos propios de uno de los mejores combinados mundiales que cuentan en sus filas con el tres veces MVP de la NBA Nikola Jokić. Todo parece abocado a esperar a ver el marcador para descubrir cuál va a ser la brecha abierta por Lebron y sus “secuaces” ante la selección de Svetislav Pešić.
Imagen redes sociales Federación Serbia Baloncesto